septiembre 2017 | Edición N°: año 56, nro. 1331
Por: Hoy en La Javeriana | Pontificia Universidad Javeriana



Sobre la paz

“La paz es una tarea que no da tregua y que exige el compromiso de todos”. (1)

“Sólo si ayudamos a desatar los nudos de la violencia, desenredaremos la compleja madeja de los desencuentros… la exigencia es construir la paz, «hablando no con la lengua sino con manos y obras»”. (2)


Sobre el respeto

«La casa común de todos los hombres debe continuar levantándose sobre una recta comprensión de la fraternidad universal y sobre el respeto de la sacralidad de cada vida humana”. (2)

“En comunidades donde todavía arrastramos estilos patriarcales y machistas es bueno anunciar que el Evangelio comienza subrayando mujeres que marcaron tendencia e hicieron historia”. (3)


Sobre la dignidad

“Todavía hoy, en Colombia y en el mundo, millones de personas son vendidas como esclavos, o bien mendigan un poco de humanidad, un momento de ternura, se hacen a la mar o emprenden el camino porque lo han perdido todo, empezando por su dignidad y por sus propios derechos”. (4)

“Escuchen a los pobres, a los que sufren… En ellos se aprenden verdaderas lecciones de vida, de humanidad, de dignidad”. (1)


Sobre la humildad

“Las vocaciones de especial consagración mueren cuando se quieren nutrir de honores, cuando la motivación es «subir de categoría», apegarse a intereses materiales, que llega incluso a la torpeza del afán de lucro”. (5)

“No podemos aprovecharnos de nuestra condición religiosa y de la bondad de nuestro pueblo para ser servidos y obtener beneficios materiales”. (5)


Sobre el perdón

“No se puede vivir del rencor, … sólo el amor libera y construye”. (6)

“No hay nadie lo suficientemente perdido que no merezca nuestra solicitud, nuestra cercanía y nuestro perdón”. (2)

“Cuando las víctimas vencen la comprensible tentación de la venganza, se convierten en los protagonistas más creíbles de los procesos de construcción de la paz.” (3)


Sobre reconciliación

“El odio no tiene la última palabra, …el amor es más fuerte que la muerte y la violencia”. (6)

“La verdad es compañera inseparable de la justicia y de la misericordia…. La verdad no debe conducir a la venganza, sino a la reconciliación y al perdón”. (6)

“La reconciliación no es una palabra abstracta; si eso fuera así, sólo traería esterilidad, más distancia”. (3)

“Todo esfuerzo de paz sin un compromiso sincero de reconciliación será un fracaso”. (3)


Sobre inclusión

“Siempre es rico incorporar en nuestros procesos de paz la experiencia de sectores que han sido invisibilizados, para que sean precisamente ellos quienes coloreen los procesos de memoria colectiva”. (2)

“No necesitamos un proyecto de unos pocos para unos pocos, o una minoría ilustrada o testimonial que se apropie de un sentimiento colectivo. Se trata de un acuerdo para vivir juntos, de un pacto social y cultural”. (2)


Sobre la esperanza

“¡Basta una persona buena para que haya esperanza! ¡Y cada uno de nosotros puede ser esa persona!”. (3)

“¡Cómo no van a poder cambiar esta sociedad y lo que se propongan! ¡No le teman al futuro! ¡Atrévanse a soñar a lo grande!”. (7)

“La cultura del encuentro es saber que más allá de nuestras diferencias somos todos parte de algo grande que nos une y nos trasciende, somos parte de este maravilloso país”. (7)

“Que las dificultades no los opriman, que la violencia no los derrumbe, que el mal no los venza”. (7)


 

1. Plaza de Armas de la Casa de Nariño Encuentro con las Autoridades. Bogotá, 7 de septiembre de 2017.

2. Homilía: “Dignidad de la Persona y derechos humanos”. Cartagena, 10 de septiembre de 2017.

3. Homilía: Reconciliarse en Dios, con los colombianos y con la creación” Villavicencio, 8 de septiembre de 2017.

4. Ángelus del Santo Padre. Cartagena, 9 de septiembre de 2017.

5. Encuentro con sacerdotes, religiosos y religiosas, consagrados y consagradas, seminaristas y sus familias de procedencia. Medellín, 9 de septiembre de 2017.

6. Gran encuentro de oración por la reconciliación nacional. Villavicencio, 8 de septiembre de 2017.

7. Bendición a los fieles desde el balcón del Palacio Cardenalicio Saludo del Santo Padre. Bogotá, 7 de septiembre de 2017.