Las certezas: los nueve millones de votos, que le dan una legitimidad electoral y una fuerza sin antecedentes al nuevo presidente. Los tres millones y medio de votos por el Partido Verde y Mockus, que constituyen la mayor votación independiente desde la vigencia de la Constitución Política de 1991. La debacle electoral en las presidenciales de los dos históricos partidos, liberal y conservador. Y se ratifica la altísima abstención histórica, 55.53% del electorado, que le pone un manto de duda a la legitimidad y la fortaleza del proceso electoral. Las incertidumbres: Bajo el gobierno de santos ¿en qué sentido se despejará el umbral de indeterminación entre la democracia y autoritarismo en el que nos puso la pretensión reeleccionista del presidente[…]