Centro Ático vincula a la PUJ como socio académico con el sector de las industrias creativas para divulgar el conocimiento y la investigación de su comunidad educativa e incidir en otros escenarios culturales. Un ejemplo de ello: su participación activa en el Festival Internacional de Cine de Cartagena, FICCI.

La Pontificia Universidad Javeriana, gracias al trabajo de Centro Ático, es socio académico desde hace 6 años del Festival Internacional de Cine de Cartagena (FICCI). En la última edición (número 59) de este Festival, cuyo tema central fue la migración y el mestizaje, la Javeriana intervino con aportes que consolidaron la agenda a partir del conocimiento, la investigación y la innovación de su comunidad educativa. Al mismo tiempo, favoreció la divulgación de la producción intelectual de su cuerpo profesoral, el intercambio de saberes, la incidencia y transformación de la sociedad y la formación interdisciplinar de sus estudiantes en el escenario donde muchos de ellos se van a desarrollar profesionalmente.

“Centro Ático relaciona a la Universidad Javeriana con este sector para que la academia salga a la industria y que docentes, estudiantes y personal administrativo participen de eventos en los que se construyan diálogos con el contexto y sus desafíos.”

Esta iniciativa es consecuencia de una apuesta y una planeación de hace varios años liderada por Centro Ático para establecer puentes de doble vía con las industrias creativas [1], teniendo como horizonte el aporte y transformación de las prácticas pedagógicas con la mediación de la tecnología (específicamente de las TIC). Centro Ático relaciona a la Universidad Javeriana con este sector para que la academia salga a la industria y que docentes, estudiantes y personal administrativo participen de eventos en los que se construyan diálogos con el contexto y sus desafíos. De acuerdo a esto, la Universidad es aliado académico en espacios donde contribuya con capital académico y científico. Toda esta apuesta le aporta a la sociedad en la construcción de su discurso y de una visión reflexiva a larga distancia que no se vea mediada únicamente por las dinámicas comerciales. Además, para lograr esto, Centro Ático cuenta necesariamente con el apoyo de un asociado de las facultades u otras unidades de la Universidad.

Fue en este marco que la Javeriana intervino en el FICCI desde distintos discursos con siete charlas a partir del tema central de la migración y el mestizaje. Camila Esguerra, investigadora del Instituto Pensar, habló sobre género y sexualidad en la representación cinematográfica sobre las migraciones. El Decano de la Facultad de Artes, Carlos Mery, conversó sobre expresión estética y mestizaje. El profesor de literatura Miguel Rocha habló sobre el cine documental y las literaturas indígenas en Colombia. Mauricio Durán Castro, Director de la maestría en Creación Audiovisual, reflexionó sobre la creación audiovisual en la era digital, y Carlos Eduardo Cortés, Director de la Carrera de Comunicación Social, revisó un trabajo de periodismo digital centrado en los inmigrantes hispanoamericanos en Estados Unidos.

“El FICCI le permitió a la comunidad javeriana entablar conversaciones uno a uno con docentes de otras universidades y con la industria: crear puntos en común y en desacuerdo (construir críticamente). Incluso, la contribución de la Javeriana le valió para acreditar a sus estudiantes y personal administrativo participantes.”

Por otra parte, Centro Ático dio un paso más en la construcción de la agenda del FICCI. En alianza con la Facultad de Artes y el Coro de Cámara de la Universidad Javeriana (bajo la dirección de Ana Paulina Álvarez, maestra en Música), se realizaron dos grandes conciertos en la iglesia San Pedro Claver (Cartagena) y en la iglesia San Ignacio de Loyola (Bogotá), junto a un master class dado por el padre Piotr Narrow [2] sobre cómo se construyó la música de las misiones jesuíticas recreada en la película “La Misión” (1985), de Roland Joffé, y que fue rodada en Cartagena y filmada justamente en la Iglesia San Pedro Clavel. Los conciertos visibilizaron por primera vez en Colombia parte del repertorio de la música barroca misional, la cual fue instrumento evangelizador en las reducciones jesuíticas en el Nuevo Mundo, jugó un papel fundamental en el vínculo con los pueblos guaraníes y logró un enlace simbólico que pretendía la construcción de una identidad cristiana marcada por saberes, valores, comportamientos, roles y jerarquías. Es una rica fuente histórica para acercarnos y preguntarnos sobre el complejo e híbrido proceso de mestizaje cultural entre los misioneros y los indígenas en medio de relaciones coloniales.

Así las cosas, el FICCI le permitió a la comunidad javeriana entablar conversaciones uno a uno con docentes de otras universidades y con la industria: crear puntos en común y en desacuerdo (construir críticamente). Incluso, la contribución de la Javeriana le valió para acreditar a sus estudiantes y personal administrativo participantes.

Sobre esta base, la Universidad Javeriana es socio académico de otros eventos como el BOmm (Bogotá Music Market), el BAM (Bogotá Audiovisual Market), el BIFF (Bogotá International Film Festival, donde se desarrolla en conjunto el brazo académico BIFF Bang), los Festivales Al Parque organizados por IDARTES y la próxima edición del Salón Internacional de la Luz; también es sede del Festival Bogoshorts y la Muestra Documental Midbo. Todos estos se realizan como encuentros con otros profesionales, otras instituciones y con la sociedad en general donde se interactúa con la tecnología para apropiarla propositivamente e impulsar los procesos formativos, innovadores y de reflexión sobre su uso y sus potencialidades creadoras. Con esta orientación, los eventos y vínculos establecidos por la Universidad van más allá del uso de recursos tecnológicos y dan cuenta del valor agregado de su Misión y Proyecto Educativo; es un beneficio académico para toda la Universidad en su búsqueda de la excelencia y la formación educativa de alta calidad con proyección social.

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[1] Sector de las empresas creadoras de contenidos a fin a Ático (audiovisual, digital y sonoro).

[2] Para toda esta iniciativa se contó con la asesoría y acompañamiento del padre Piotr Nawrot, misionero verbalista polaco, musicólogo y especialista en la historia de la música litúrgica del barroco boliviano. Nawrot, en los últimos 30 años, se ha encargado de estudiar y reconstruir esta música de la mano de la comunidad de Chiquitos (Bolivia), la cual guardó de generación en generación repertorios que suman alrededor de 3.000 partituras de la música barroca misional de las reducciones jesuíticas de América.

 


*Practicante del área de comunicaciones de la Vicerrectoría Académica.