agosto 2009 | Edición N°: año 48 No. 1250
Por: Pedro Mejía Salazar | Pontificia Universidad Javeriana



Los abogados javerianos que se graduaron en 1983 decidieron voluntariamente crear una beca para apoyar cada semestre a un estudiante de Derecho que tenga problemas económicos para continuar su carrera.

Egresados de la promoción de abogados 1983 de la Universidad Javeriana. Abajo de izquierda a derecha: Beatriz Acero, Liliana Valenzuela y Claudia Bubaque. Arriba en el mismo orden: Carlos Carreño, Camilo Vargas, Jairo Cifuentes y Fernando Carrillo.

CUANDO EN el 2008 la promoción de egresados de 1983 del programa de derecho de la Pontificia Universidad Javeriana celebró sus 25 años surgió la idea de crear un fondo para apoyar con una beca a algún estudiante de la misma carrera que tuviera problemas económicos para continuarla.

El propulsor de la iniciativa fue Fernando Carrillo Flórez, quien está radicado en París, donde trabaja como director adjunto de la oficina del banco interamericano de desarrollo encargado de coordinar la cooperación y las relaciones de América latina con Europa.

El también ex Ministro de Justicia durante la administración de César Gaviria y miembro de la Asamblea Nacional Constituyente, les envió a sus compañeros de promoción una carta con la propuesta, que reunió el sentimiento de todos los que estaban allí presentes.

“Por la situación económica parecía difícil, pero hubo entusiasmo y se aplaudió la idea. la vida nos ha privilegiado y todos queríamos ayudarle de alguna forma a nuestra Universidad, que ha sido nuestra cuna”, cuenta Liliana Valenzuela, una de las mayores impulsoras del proyecto que se hizo realidad a partir de este semestre.

La promoción de 1983 se precia de ser una de las más unidas que ha tenido la Carrera en su historia. “Nosotros nos reunimos cada cinco años, y cada mes nos recordamos o nos comunicamos de alguna forma, gracias a Liliana”, afirma Camilo Vargas. El fallecimiento de algunos compañeros tuvo que ver en la unión que hoy tienen. Jorge Andrés Araujo murió en la bomba del club El Nogal, mientras Beatriz Torres fue asesinada en Pereira cumpliendo con su trabajo. otros cinco compañeros han muerto por otras causas.

A las reuniones de reencuentro han llegado a asistir 54 de los 65 egresados de 1983, incluso con la participación de algunos que empezaron y no terminaron la carrera. Para la beca se han vinculado cerca de 30 abogados, con posibilidades de ampliar a 50.

En un principio se pensó en crear una fundación, pero la carga que esto implicaba los hizo desistir de la idea. “le dimos muchos debates en las reuniones, hasta llegar a la mejor fórmula, que fue debitar las cuotas de nuestras tarjetas. El éxito de la beca está en la parte administrativa y operativa”, explicó Beatriz Acero.

Para este proceso se cuenta con el apoyo de Maria Paola Aguirre Cote, jefe de la oficina de recaudación de Fondos por donaciones de la Javeriana, quien adelanta los trámites ante el banco davivienda para que funcione este sistema de recaudación.

“Nadie tiene disponibilidad de ir a pagar el cheque a un banco, por tiempo o porque se olvida, por eso la fórmula de debitar por cuotas directamente de la tarjeta es para nosotros la más adecuada y la que puede garantizar que sea sostenible en el tiempo”, agregó Liliana Valenzuela.

Una vez se contó con los recursos para financiar el 50% de la matrícula de un estudiante, se contactó a la Universidad para solicitarle que postularan candidatos. Un comité de egresados recibió varias opciones que cumplían con los tres requisitos que se establecieron: estar en un semestre avanzado, tener un promedio mínimo de 3,8 y no contar con la capacidad económica para pagar su matrícula y continuar la carrera.

En un principio se pensó en crear una fundación, pero la carga que esto implicaba los hizo desistir de la idea. “Le dimos muchos debates en las reuniones, hasta llegar a la mejor fórmula, que fue debitar las cuotas de nuestras tarjetas. El éxito de la beca está en la parte administrativa y operativa.

“La deserción estudiantil en Colombia es un tema que nos preocupa. En el país sólo el 30% de la población accede a una universidad y de ella el 50% se retira sin terminar la carrera”, contó Jairo Humberto Cifuentes Madrid, quien además de ser egresado de la misma promoción fue vicerrector Académico de la Javeriana y hoy es asesor de rectoría.

La primera beneficiada, quien pidió reserva de su nombre, se enteró de la beca por intermedio de la decanatura de la Facultad de derecho. Mandó una carta solicitando su postulación y después de un proceso conoció el resultado que le permitió seguir con sus estudios.

“La beca me llegó en el momento indicado, porque tenía dificultades económicas, estaba pasando por una situación difícil y fue una gran ayuda para mí, mis papás y para mi familia. Yo lo asumo sobre todo como un reconocimiento por mi labor, porque me había esforzado muchísimo por tener un excelente semestre y logré el promedio más alto de toda mi carrera. Estoy muy agradecida porque significó la posibilidad de tener un semestre tranquila”.

Para el próximo semestre el objetivo es darle visibilidad a la beca Promoción de Abogados 1983 en los folletos de la Facultad, como una de las oportunidades financiamiento de la matrícula, para que más estudiantes se enteren y se postulen.

“Viendo ejemplos como estos, otras promociones y egresados de otras carreras podrían seguir la pauta. Sería una maravilla que cada promoción tuviera su beca. Para nosotros es muy satisfactorio que sean los mismos egresados quienes busquen la Universidad, acá siempre van a contar con nuestro apoyo”, concluyó María Claudia Peñaranda, directora de la Secretaría de relaciones con Egresados.