1 de Mayo del 2015 | Edición N°: Año 54 N° 1307
Por: Redacción Hoy en la Javeriana | Pontificia Universidad Javeriana



El Padre Carlos Eduardo Correa Jaramillo, S.J. Provincial de la Compañía de Jesús en Colombia y Vice Gran Canciller de la Pontificia Universidad Javeriana, visitó la institución entre el 21 y el 26 de mayo.

La  conferencia  “La  Misión  de  la Compañía de Jesús”, que se llevó a  cabo  el  lunes  25  de  mayo,  fue el acto central de la visita que durante  cuatro  días  realizó  a  la  Pontificia Universidad  Javeriana,  el  Padre  Carlos Eduardo Correa Jaramillo, S.J. Provincial de  la  Compañía  de  Jesús  en  Colombia y Vice Gran Canciller de la institución.

Fe,  justicia,  diálogo,  colaboración  y reconciliación  fueron  las  cinco  grandes apuestas sobre las cuales hizo énfasis el Padre Correa, con la necesidad de ir a las fronteras físicas, culturales, existenciales, espirituales… para ser puentes. “Nuestra misión es ser puentes que unan”.

La agenda también incluyó reuniones con  los  decanos,  los  profesores  miembros  de  los  Consejos  de  Facultad  y  los profesores  Consejeros  Académicos,  los estudiantes miembros de los Consejos de Facultad y de grupos estudiantiles, algunos egresados, algunos grupos de investigación, los vicerrectores y su equipo de trabajo, los Consejos de las Facultades de Filosofía,  Teología  y  Derecho  Canónico, con el Secretario General y con el Rector. Pero además tuvo un almuerzo   con   personas   de   servicios de alimentación, conserjes  y  personal operativo  y  un  de- sayuno  con  jesuitas que  trabajan  en  la Universidad.

La  revista  Hoy  en la Javeriana entrevistó al Vice Gran Canciller con el fin de conocer las percepcio- nes que le quedaron de esta visita.

¿Qué significado tiene esta visita?

Como Provincial soy el Vice Gran Canciller de la Universidad y presido el Consejo  de  Regentes,  que  tiene  como  su función más importante dar las grandes orientaciones  a  la  Universidad.  Es  el Consejo Directivo el que toma todas las decisiones de gobierno. Entonces, yo no vengo  a  gobernar,  vengo  para  conocer más a fondo la Universidad. Para mí era muy  importante  poder  tener  durante estos  cuatro  días  conversaciones  con todos los estamentos, con estudiantes, profesores,  egresados,  jesuitas,  decanos,  vicerrectores…  de  tal  manera  que yo pudiera tener una mejor percepción, sobre todo en un momento importante como  es  el  inicio  de  un  nuevo  proce- so  de  planeación,  para  lo  cual  es  clave  tener  conciencia sobre  las  fortalezas y  las  oportunidades de mejora de la Universidad.  De  ahí  que mis  preguntas  fundamentales en todas las   reuniones   eran ¿cómo   perciben   la Universidad?,   ¿cuáles son las fortalezas? y ¿cuáles son las oportunidades de mejora? Eso me permite a mí una visión muy amplia, de tal manera que en el Consejo de Regentes yo pueda presentar una visión y allí el Rector tomará nota de lo que él considere importante para luego ya sí tomar decisiones de gobierno a través del consejo directivo, de los decanos y de todos los estamentos de la Universidad.

¿Cuál es el balance general de esta visita?

De las cosas más importantes de esta visita es reconocer una gran fortaleza de esta Universidad que son las personas. Es un grupo humano muy cualificado no solo en lo académico sino también humanamente. Gente comprometida, que quiere  la  Universidad  y  que  es  crítica. Percibo un gran amor por la institución y eso genera una impresión muy positiva. Aquí se puede trabajar y se puede seguir mejorando. También encuentro un grupo humano con esperanza, con muchas ganas de empujar un proceso bonito. Y veo una comunidad que ve la necesidad de  que  esta  nueva  planeación  lance  a la Universidad a retos muy importantes, que sea una planeación que priorice tres o cuatro propósitos que jalonen todo el proceso universitario. Porque a veces las planeaciones dan demasiadas prioridades que por ser tantas uno ni se acuerda y dejan de ser prioridades. El proceso de planeación está apuntando por ahí y me parece muy importante.

¿Hubo alguna reunión en especial que le generó mayores satisfacciones?

Me  encantó  la  reunión  con  los  estudiantes.  Fue  muy  bello  escuchar  estudiantes  entusiasmados  con  lo  que  la Universidad  les  ofrece,  los  grupos,  las posibilidades  de  hacer  ejercicios  espirituales,  los  talleres  de  liderazgo,  Misión País… y cómo eso les ha ayudado a transformar sus propias vidas. Sentí que la Universidad puede lograr transformaciones muy bonitas en los estudiantes, porque  humanamente  se  siente  tocados, transformados, se sienten llamados a un mayor servicio al país, a pensar en otros  que  están  sufriendo  situaciones difíciles. Fue la reunión que más esperanzas me dejó.

También  me  impactó  muchísimo  la reunión con los profesores que son consejeros  académicos,  que  acompañan  a los estudiantes no solo en los procesos académicos sino también en sus proceso  de  vida.  Los  estudiantes  llegan  con situaciones muy difíciles de su familia, situaciones económicas, y estos profesores los acogen, los acompañan, los remiten a asesoría psicológica, son como otros papás y mamás, lo que demuestra que la Universidad está preocupada por acompañar a las personas. Eso me gustó muchísimo.

¿Quisiera enviarle un mensaje a la comunidad javeriana una vez terminada la visita?

La Universidad Javeriana tiene una propuesta  educativa  muy  integral,  que  le apunta  a  una  gran  profundidad  en  lo académico,  pero  al  mismo  tiempo  un gran  desarrollo  de  lo  humano,  que  es fundamental. Yo le diría a la Universidad que vale la pena seguir trabajando mucho  eso,  los  profesores  son  fundamentales para transmitir y para acom- pañar  a  los  estudiantes  no  solo  en  los procesos  académicos  sino  también  en los procesos humanos. Un profesor desde cualquier disciplina puede ayudar a que  los  estudiantes  se  acerquen  a  mirar al país desde una perspectiva ética, pueden  ayudar  a  que  piensen  que  todos  tenemos  que  aportar,  renunciando muchas veces a uno mismo en algunas cosas. Si eso no se da, formamos buenos académicos, pero egoístas y eso no funciona. Entonces, animo a la Universidad a que trabaje en esos dos aspectos.

La  Universidad  Javeriana tiene una propuesta educativa  muy  integral,  que le apunta a una gran profundidad  en  lo  académica, pero al mismo tiempo un  gran  desarrollo  de  lo humano,   que   es   fundamental.