Encuentro con el Vice Gran Canciller
El Padre Carlos Eduardo Correa Jaramillo, S.J., Vice Gran Canciller de la Pontificia Universidad Javeriana, y Provincial de la Compañía de Jesús en Colombia, estuvo en la Universidad el miércoles 28 de enero para tratar asuntos de la Rectoría, de las Vicerrectorías y otros temas institucionales.
El 30 de septiembre el Padre Carlos Eduardo Correa Jaramillo, S.J. asumió como Provincial de la Compañía de Jesús en Colombia y por ende al mismo tiempo como Vice Gran Canciller de la Pontificia Universidad Javeriana.
Con el fin de ampliar su perspectiva sobre la institución participó en ocho breves reuniones el pasado 28 de enero en las cuales conoció de primera mano aspectos relacionados con los asuntos de la Rectoría, las cinco Vicerrectorías (Académica, de Investigación, Administrativa, de Extensión y Relaciones Interinstitucionales y del Medio Universitario), el Consejo Direc- tivo Universitario, los Decanos, el Hospital Universitario San Ignacio, las Facultades Eclesiásticas de Filosofía y Teología y la Reforma Estatutaria.
El Padre Carlos Eduardo Correa Jaramillo, S.J. estudió Filosofía en la Universidad Javeriana entre los años 1980 y 1984 y luego estudió Teología entre 1987 y 1990. “Después como Sacerdote nunca trabajé con la institución, he venido a eventos de paso y por eso yo creo que venir a la Universidad ha sido para mí muy importante porque es generar un gran conocimiento que me da mucha confianza en lo que estamos haciendo aquí”.
Este primer encuentro se complementará con la visita oficial a la Universidad, anunciada para los días 21, 22, 25 y 26 de mayo. Anteriormente el Provincial visitará la seccional, Javeriana Cali, los días 20, 21 y 22 de abril.
¿Cuál fue el motivo principal de su visita?
Cuando asumo como Provincial de los Jesuitas en Colombia, automáticamente yo quedo nombrado Vice Gran Canciller de la Universidad, por eso yo le pedí al Rector un día donde me pudieran hacer una presentación general de toda la Universidad, de las Vicerrectorías y de todas las dependencias para yo tener un mapa muy general, pero muy importante, sobre qué es la Universidad Javeriana y cómo funciona.
¿Qué tanto cambió con estos encuentros la percepción o imagen que tenía previamente de la Javeriana?
Mi imagen de la Universidad Javeriana es que es una gran obra que hace un trabajo importantísimo de formación en este país, pero tengo que confesar que he quedado descrestado. Realmente el trabajo de la Universidad es inmenso. La cantidad de programas y de proyectos que están desarrollando, toda la implicación logística que esto tiene en la parte por ejemplo administrativa, de organización, es impresionante. He encontrado una Universidad muy organizada, muy seria, muy comprometida, que está logrando realmente cosas muy importantes.
¿Cuál es su balance de estas reuniones?
Un balance muy positivo, un balance de volver a sentir que esta obra está haciendo un gran bien en el país, que está realmente comprometida con la sociedad, pensando en formar gente no solo para que sean buenos profesionales en sus ramas sino también buenas personas, comprometidos con la sociedad, capaces de ser honestos, transparentes, no corruptos, y yo creo que eso es fundamental para el país, sino es eso, nunca vamos a tener paz en este país. Ese es el balance general que yo hago.
¿Quedaron tareas o instrucciones pendientes?
No, porque precisamente era una presentación general para yo ubicarme, luego las tareas arrancarán en la reunión del Consejo de Regentes que yo presido, que es el consejo que da las grandes orientaciones a la Universidad y ya comenzaremos a mirar un poco más cosas, que ya vienen trabajándose desde años anteriores y que yo voy a asumir. Ya estuve en el primer Consejo de Regentes el 18 de noviembre, que fue más un poco la presentación del Consejo, de lo que se hace, de las perspectivas grandes, pero ya el trabajo de generar orientaciones se irá dando en las próximas reuniones.
“Mi imagen de la Universidad Javeriana es que es una gran obra que hace un trabajo importantísimo de formación en este país, pero tengo que confesar que he quedado descrestado”.