Falleció el P. Adolfo Nicolás, S.J.

La Javeriana lamenta profundamente la partida de quién fue Superior General de la Compañía de Jesús y Gran Canciller de la Universidad entre 2008 y 2016.

El P. Nicolás murió este 20 de mayo, a sus 84 años, en Tokio, Japón. De origen español (Villamuriel de Cerrato, Palencia en 1936), se caracterizó por su gran apertura, sencillez e inteligencia. Al anunciar su deceso a los jesuitas a través de una carta, el padre Arturo Sosa, S.J., actual Superior General de la Compañía de Jesús, lo describió como "un hombre sabio, humilde y libre; entregado al servicio de modo total y generoso; conmovido por los que sufren en el mundo, pero a la vez rebosante de la esperanza que le infundía su fe en el Señor Resucitado; excelente amigo, de los que aman la risa y hacen reír a otros; un hombre del Evangelio".

La Pontificia Universidad Javeriana tuvo la oportunidad de recibirlo en sus instalaciones el 12 de agosto de 2013 cuando realizó un viaje por América Latina entre los días 11 y 16 del mismo mes. En esa ocasión se realizó el conversatorio 'La Universidad y su Comunidad', cuyo escenario fue el coliseo del Centro Javeriano de Formación Deportiva para albergar a las más de mil personas que asistieron para escuchar su intervención titulada 'Los exalumnos jesuitas y su responsabilidad social para lograr un futuro mejor. ¿Qué significa ser creyentes hoy?'.  Luego visitó las instalaciones del Centro Ático donde las autoridades de la Universidad le presentaron las propuestas sobre innovación, investigación, tecnología, creación y relaciones con la comunidad, que se promueven desde dicho centro.

Durante su visita a Colombia, el P. Adolfo Nicolás, S.J., al referirse al proceso de paz que en ese momento se adelantaba entre el gobierno y la guerrilla, destacó que "es más humano trabajar por la paz y trabajar por un entendimiento. No siempre saldrá todo como nos gusta, pero por lo menos la mayoría de la población puede vivir en paz y disfrutar de los bienes que tiene Colombia, que son muchos (...) Todos los colombianos deben contribuir para que el proceso de paz que adelante el Gobierno con la guerrilla de las Farc sea una realidad...".

El padre José María Rodríguez Olaizola, S.J. en una breve reflexión, al recordar la vida del P. Nicolás, destacó su propuesta "de ser fuegos que encienden otros fuegos", idea tomada de san Alberto Hurtado. "Arder con el evangelio. Arder con la pasión de vidas enraizadas en el amor. Arder para iluminar el mundo con la luz prestada de Dios".