«Renovar, desde nuestra esencia, la forma en que la función social de la universidad nos sitúa como actores privilegiados en la formación de pensamiento crítico y en la instauración de modelos de desarrollo que avoquen por el bienestar del ser humano, la justicia, la inclusión, la ética, la solidaridad, el respeto de la dignidad humana, la acogida del otro, el cuidado de nuestra casa común y por la evolución científica y cultural de la sociedad».

Luis David Prieto Martínez, Pacto Educativo Global: educar para un futuro compartido.

 

Este último año se ha caracterizado por una particular situación de salud pública originada por la COVID 19, lo que ha significado —además de grandes desafíos sociales— inmensos retos a las Instituciones de Educación Superior (IES). Por esta razón, la Universidad Javeriana ha afrontado esta crisis de manera diversa, dando cuenta de su capacidad para adaptarse y transformarse en un entorno que nos ha exigido mantener una visión de conjunto, tanto de la situación como de los procesos institucionales, respondiendo en tiempos breves con acciones efectivas en materia de acompañamiento y cuidado de los miembros de la comunidad educativa y con los mecanismos necesarios para garantizar la continuidad de las actividades académicas de docencia, considerando y cuidando la variada naturaleza de los procesos académicos.

En este sentido, abordamos esta nueva etapa desde la institucionalidad manteniendo el norte en el proyecto educativo de la universidad, el cual se encuentra enmarcado en el mejoramiento permanente, la formación integral y el cuidado de la persona, tareas que se realizan de mejor manera en la relación e interacción con el otro en un espacio formador y transformador como lo es el campus de la Universidad. A esto se suma la acogida favorable de los modos de enseñanza como opciones flexibles que nos permiten adaptarnos a un contexto con altos niveles de incertidumbre, favoreciendo experiencias de vida significativas; profesores, estudiantes y directivos reconocen en la presencialidad esa vía potente para alcanzar los resultados de aprendizaje esperados.

la Universidad Javeriana ha afrontado esta crisis de manera diversa, dando cuenta de su capacidad para adaptarse y transformarse en un entorno que nos ha exigido mantener una visión de conjunto

Este es el camino hacia una opción de transformación de retorno gradual y seguro hacia la presencialidad, fortaleciendo el sentido curricular y la estrategia pedagógica para que su implementación tenga una incidencia de forma positiva en el aprendizaje. De esta manera, la Universidad se concentró en atender el desarrollo de actividades de docencia y ajustó sus procesos a todo nivel para adaptarse al contexto, potenciando el uso de herramientas tecnológicas que median en las actividades que apoyan la toma de decisiones y su ejecución.

Así mismo, se continuó trabajando en la relación profesor-estudiante y el trabajo que esto implica en términos de los acompañamientos que se brinda a cada uno de ellos, centrado en la confianza y la importancia de seguir construyendo redes de colaboración que contribuyan al logro del desarrollo sostenido de las actividades académicas de docencia. Esto con el propósito de mantener las dinámicas formativas acordes con las necesidades que nos indica la situación actual. Por ende, para que estrategias como la alternancia funcionen adecuadamente es necesario garantizar los diferentes recursos físicos, tecnológicos y logísticos, de manera que la comunidad educativa pueda aprovechar las facilidades asociadas a este esquema.

se ha transformado el campus y las formas de enseñar para que los estudiantes vivan una experiencia universitaria integral

Por esta razón, la Universidad dispuso de los espacios y los recursos para la generación de sinergias entre las diferentes unidades académicas y administrativas en pro del logro de los objetivos de la estrategia de continuidad de actividades de docencia. Es así, como desde la Dirección de Admisiones y Registro, la Dirección Jurídica, las Vicerrectorías Académica, Administrativa y del Medio Universitario, armonizaron los procesos para realizar una planeación integral y articulada que ha reflejado el sentido de unidad propio de la Javeriana.

Por consiguiente se ha transformado el campus y las formas de enseñar para que los estudiantes vivan una experiencia universitaria integral y puedan asistir para disfrutar de otros espacios como la Biblioteca, el Centro Javeriano de Formación Deportiva y diferentes escenarios dotados con toda la conectividad en el campus para sus clases remotas, entre otros servicios, sin dejar de lado los protocolos de bioseguridad requeridos y las medidas de autocuidado tales como el distanciamiento social, el uso de tapabocas, el constante lavado de manos y el control de aforos, que siguen vigentes para contribuir al cuidado y bienestar de cada miembro de la comunidad educativa.

Ecosistema de aprendizaje en clave de las nuevas necesidades del entorno

Con base en los múltiples aprendizajes ganados en estos meses y a partir de las fortalezas alcanzadas en los últimos años se ha trabajado como comunidad educativa en materia de la oferta académica, para encontrar participativa y colaborativamente estos caminos que ubican al estudiante y sus relaciones con el entorno en el centro de su acción, es decir, a través de un ecosistema de aprendizaje que ayudará a fortalecer las opciones de acompañamiento, para formar en autonomía y que el estudiante sea capaz de establecer sus propias rutas formativas de acuerdo con sus necesidades, ritmos y estilos de aprendizajes.

Para ello, se han consolidado propuestas en materia de innovación curricular e innovación pedagógica que permitan obrar un cambio cultural a través de líneas de acción que incluyen la formación de profesores, nuevos ambientes de aprendizaje renovados y una forma más flexible de pensar y concebir las experiencias formativas que se integran en los currículos.

Gracias a estas nuevas apuestas por la innovación se ha logrado el fortalecimiento de los rasgos diferenciadores de la Universidad, especialmente en una formación que promueva un profundo sentido humanista y de sensibilidad socio ambiental, a través de un proyecto educativo que incluya las mediaciones tecnológicas; la educación en el marco de una cultura digital para encontrar nuevas opciones que den sentido a la articulación entre lo presencial y lo remoto.

A partir de esta apuesta, se busca pensar en una forma sistemática la oferta académica y las interrelaciones que se tienen con el contexto, muy sensible a identificar y leer sus dinámicas y transformaciones, con la capacidad de ejecutar cambios que no dan espera, requeridos para: 1) pensar en transformar el proyecto educativo para incluir mediaciones tecnológicas; 2) repensar la educación « a distancia» y acercarnos más a la transformación digital de la educación; 3) entender que la interacción profesor-estudiante es fundamental y que puede suceder también en forma remota; y 4) tener una aproximación flexible, integral e integradora, que permita adaptar las transformaciones y cambios en lo académico, en el medio universitario y en lo administrativo.

De igual manera, la Universidad en sus procesos de reflexión institucional viene trabajando en temáticas para el mejoramiento interno como la construcción de una cultura de la comunicación y el fortalecimiento de la oferta académica, de la interdisciplinariedad, la construcción de paz, la innovación, la sostenibilidad y la identidad institucional a partir de las cartas encíclicas Laudato Si’ y Fratelli Tutti del Papa Francisco, entre otros.