“Siempre he considerado muy importantes dos cosas para el desarrollo de un país: la educación y el empleo. Estar en la Universidad Javeriana ha sido la posibilidad de contribuir a eso que creo”.
"Para mí la javerianidad es la cultura del respeto. Se toman decisiones entre trabajadores y directivos para que haya responsabilidad y un ambiente laboral donde uno se sienta a gusto”.
“La profesión es una herramienta para y no un fin, máxime en la medicina donde a veces la convertimos en eso. Es un proyecto social, es decir, uno se debe a alguien y uno tiene que devolver lo que ha recibido”
“Soy lo que soy por la Universidad Javeriana, por la educación de los Jesuitas. Ha sido para mí una casa en la que he tenido la oportunidad de conversar sobre la construcción de este proyecto educativo”.
“La libertad tan grande que produce trabajar en la Universidad Javeriana es producto de su transparencia. Aquí todo se puede mostrar, todo se puede contar. Los límites del conocimiento, ya sea administrativo o académico, no existen”.