“La perseverancia no es una cuestión meramente biológica, tampoco es cuestión de edad, es una cuestión de convencimiento, de que lo que estoy haciendo es la voluntad de Dios”.
“La experiencia que tuvo Jesús la mies es muchísima pero hacen falta trabajadores, esa frase la sentí como si Dios me estuviera diciendo: yo quiero que seas uno de esos trabajadores”.