
Javerianos:
Al iniciarse el año escolar de 1966, presento mi cordial saludo de bienvenida a todos los alumnos, profesores y funcionarios de la Universidad Javeriana, deseándoles un nuevo año con muchos éxitos y positivas realizaciones en sus diferentes especialidades.
Ante todo, quiero dirigirme a los 1.350 estudiantes de primer ario de todas las Facultades de la Universidad, deseándoles una rápida adaptación a la vida universitaria., relievando el privilegio de que gozan al ingresar a las aulas javerianas, ya que por cada uno de ellos fueron rechazados más de 3 ó 4 aspirantes, quizá con iguales cualificaciones. Los felicito, además, porque la competencia fue reñida, y guardo la esperanza de que la Javeriana tendrá la gran satisfacción de comprobar finalmente que el selecto grupo escogido ha sabido responder a la distinción de que fue objeto. Aquí resulta oportuno que meditemos un momento y tengáis presentes las palabras del Evangelio: «Muchos son los llamados, y pocos los escogidos».
Se que al comienzo de toda misión, y especialmente al iniciar un nuevo año, se encuentran algunos tropiezos, pero también estoy seguro de que los javerianos serán los primeros en ayudar a vencer los obstáculos hasta salir airosamente adelante como lo han hecho siempre.
La Universidad ha ensanchado sus cupos hasta el máximo, con un aumento de unos 500 alumnos de tiempo completo para 1966. Elevo mis oraciones a Dios por todos los javerianos y los invito a que en 1966 luchemos todos unidos como un solo cuerpo, por el bienestar de nuestro claustro universitario y su rápido progreso.
Cordialmente,
Jesús Emilio Ramírez, S.J.
Rector.