LA TUNA FEMENINA JAVERIANA EN VENEZUELA
Invitadas por el Gobierno de Venezuela, y por intermedio del Embajador del hermano país en Colombia; Dr. M. Orsiai y su señora, las integrantes de la Tuna Femenina de la Universidad realizaron una exitosa gira por diversas ciudades venezonalas, en donde los aplausos y los buenos recuerdos fueron un justo reconocimiento a la calidad artística de las t ‘tunas .
Martha Alvarado, quien en calidad de Directora de la Tuna Femenina tuvo la responsabilidad de la gira, en representación de la Universidad, y Becky Mardach, recientemente nombrada como nueva Directora, nos contaron algunas de las gratas experiencias que dejó Venezuela en nuestras embajadoras.
«Salimos hacia Venezuela el 13 de julio. Las vacaciones nos dieron la oportunidad de llevar la representación de la Javeriana y de aceptar la invitación que se nos hizo. Llegamos a San Cristóbal el 14 y el 15 tuvimos nuestra primera presentación en el Club de la Policía. Amenizamos Los festejos del día nacional de la Policía, Esta primera presentación en tierra venezolada fue para nosotras un anuncio de la extraordinaria acogida que encontramos en todos los sitios en donde nuestras voces y nuestras guitarras se hicieron presentes. El 16 viajarnos a Mérida. De antemano, el Gobernador del Estado de Mérida, Dr. Rigoberto Henríquez Vera, nos había invitado para que le diéramos alegría a la celebración del día de la Policía Nacional en ese Estado. Así, nos presentamos en el Club I ‘El Campito» de la policía venezolana, Esa noche ofrecimos también una serenata al Jefe de Protocolo de la Gobernación, el Dr. José Moro Valery, quien fue el coordinador de nuestra presentación en el Club de la Policía, El 19 salirnos hacia Caracas. Nuestro hospedaje corrió esa noche por cuenta de los PP. jesuitas y en el Colegio San Ignacio nos brindaron un lugar, a pesar de haber llegado de nuestro viaje pasada la medianoche, Al día siguiente, el P. José del Rey, S. J. , nos puso en contacto con el Ministerio de Fomento Venezolano, el cual se encargó de nuestra atención y hospedaje durante Jos días que permanecimos en Caracas.
Celebrarnos nuestra Independencia en la Embajada colombiana de Caracas. Recibimos allí La cordial invitación de la «Casa de Colombia», para que con nuestra música típica, diéramos sabor de patria a nuestras presentaciones. El Círculo Militar de Caracas nos escuchó con mucho agrado, nos aplaudió con efusión y nos atendió solícitamente. Don Alfonso de la Hoz, quien nos puso en contacto con la Casa de Colombia, escuchó también nuestras voces y guitarras en la serenata de agradecimiento que le ofrecimos. Nos hicimos presentes en la Universidad Central de Caracas, en el Concierto de la Confraternidad Venezolana. Fuimos recibidas y aplaudidas con mucho entusiasmo. ¡Una linda experiencia !
Estamos invitadas nuevamente. Y en enero, si las cosas no cambian, nos haremos presentes en la Feria de San Cristóbal, en donde procuraremos revivir las cosas buenas que nos dejó esta primera salida de nuestra Tuna, donde nos encontraremos con los amigos que allí dejamos y donde transmitiremos nuestra alegría a la tierra que nos recibió con tanto cariño
Felicitaciones ‘tunas’ y hasta pronto.
Así es La Tuna Femenina
Es difícil, en pocas líneas, analizar la historia de una persona. Talvez se describan como en una caricatura los rasgos más sobresalientes; quizás, precisamente por eso, los más superficiales. No es fácil, igualmente, entrar a describir a un grupo que, desde su nacimiento, se ha distinguido por los rasgos humanos, porque junto a la música se ha ido configurando, creciendo, madurando. Y este proceso de crecimiento, aunque lo describamos en unas cuantas líneas, no dice lo que cada una de Las integrantes de la Tuna Femenina de la Javeriana siente por ella, Io que cada una ha aportado. Lo que cada una ha aprendido y entregado. No es fácil tampoco describir lo que ha hecho que nuestra Tuna sea la primera del país en su género, y la que actualmente ocupa el primer lugar dentro de las universidades que tienen agrupaciones de esta clase.
Conversamos COA Martha Alvarado, directora saliente, sobre el grupo,
Fueron duros los primeros tiempos. Hace 5 años, un 15 de abril, una entu— szasta estudiante de ? emodlsrnc, se dió a la tarea de organizar lo que en ese momento parecía imposible: coordinar, agrupar y acoplar musicalmente unas cuantas voces y guitarras femeninas; infundir en el grupo la idea de la Tuna; pasar por muchas puertas y per sonas, pidiendo apoyo; conversar con no pocos sobre las dificultades que un grupo de mu chachas jóvenes podrían encontrar, compitiendo con agrupaciones masculinas, a las que parecía reservado el privilegio de conformar las ya tradicionales r ‘Tunas’ t , En fin, las di ficultades que se encuentran cuando algo nace o busca surgir, prácticarnente de la nada. Esa entusiasta estudiante se llamaba Martha Vergara. Hoy estudia Administración y es una de Las ‘ ‘tunas honorarias» que llevan la capa y la beca, cuando el tiempo, el trabajo y las ocupaciones del estudio lo permiten.
Ese año nos «financiamos» a base de serenatas y de presentaciones. Fueron tiempos difíciles, pues musicalmente el acoplamiento no fue rápido, Con el dinero que re cogimos lograrnos arreglar la sede, es decir, el lugar’ que nos dió la Universidad para nuestros ensayos, para guardar nuestros instrumentos, y para crear el clima de amistad y jovialidad necesarias para llevar adelante lo que apenas estaba comenzando.
Nuestro estreno en serio fue en Manizales, Nos fuimos a la Feria de ese ano (1971), y en esa primera gira nos acompañó la mamá de Martha, Era necesario que alguien estuviera con nosotras. Fue una gran ayuda. En la gira, Ana María Arbeláez mostró sus cualidades como ‘l loro despertador». A todas nos ponía en pie desde temprano. . . Claro. al final, nos tuvimos que aguantar SUS desayunos. Como era La primera que se le
vantaba, nos preparaba también los desayunos. Tanto se movió, que al poco tiempo fue e— legida como Directora, cuando Martha, por el trabajo y el estudio, no pudo asistir más de tie mpo completo» al grupo que había conformado.
En 1973 nos fuimos a Cali. Los Juegos Nacionales Universitarios nos dieron la oportunidad de acompañar a los deportistas de la Universidad y de mostrar los progresos logrados en dos años de trabajo. Habíamos madurado como grupo, estábamos renova— das con nuevas integrantes que le dieron ala Tuna un empuján grande y juvenil. En Bogotá, mientras tanto, continuábarnos participando en las actividades que habían llegado a ser par te de nuestra vida ordinaria, y que formaban nuestro objetivo dentro de la Universidad: hacer más agradable el clima de estudio y de trabajo, transmitir alegría sana y permitir a las integrantes del grupo el desarrollo de sus cualidades humanas, artísticas y la madurez que un grupo humano bien conformado, da a SUS integrantes.
En 1974, de nuevo con Martha Vergara como Directora, nos fuimos a Cartagena. En el Colegio Salesiano representamos a la Universidad, en una de las experiencias mejores que hemos tenido. Cada vez el grupo tomaba mejor fisonomía y musicalmente habíamos avanzado lo suficiente como para figurar ya en las invitaciones y presentaciones de otras universidades, organizaciones y entidades, En la Universidad, además, siempre podían contar con nosotras y las ‘ ‘tunas» éramos ya familiares a los javerianos.
Pero fue en 1975 cuando tuvimos que comenzar a excusarnos, en varios sitios, pues las invitaciones y los compromisos eran más numerosos que nuestras posibilidades de cumplimiento. Con Perla Pinillos, alumna de la Facultad de Derecho, como Directora, gracias al trabajo de todas, el grupo logró un nivel humano y artístico muy grande. Tanto que nos llevó a Medellín a la más cálida de nuestras giras. Todas las tunas recordaremos con mucho cariño al Hermano Aurelio García, Prefecto del Colegio San Ignacio de MedeIlín, quien nos brindó todo su apoyo en esta gira, hizo nuestra estadía en Medellín supremamente agradable, y logró para nosotras las conexiones y presentaciones suficientes como para pensar en la grabación de nuestro primer disco. Medellín fue un buen examen para nosotras y creo que pasamos «sobradas» la prueba. Todavía tenemos la posibilidad de hacer Las grabaciones y no hemos descartado la idea de lanzar el L. P.
Talvez lo que mejor muestra, en este momento, la altura lograda por la Tuna Femenina, como grupo artístico y humano, es la distinción que nos di6 la Embajada de España, y que solo ha sido otorgada a tres agrupaciones en el país: LA BECA. Ella es un símbolo nuestro. V 5 años de trabajo están ahí, en ese pedazo de tela que llevamos en todas nuestras presentaciones, adornando la capa. Este año, 1976, nos trajo esta satisfacción y, además, la satisfacción de la primera gira fuera del país, con todo lo que logramos en Venezuela en las pasadas vacaciones. No podemos dejar de lado nuestro himno. Aura Mercedes Moreno lo compuso y es algo que nos identifica y nos agrupa.
Esa es un poco, nuestra historia. Pero detrás de cada paso está el esfuerzo y la mística de cada una de las ‘ ‘tunas». De cada una de las que han pasado por ella y que diffcilmente olvidan lo vivido en ella. Por eso regresan. . .
Cómo llegar a ser ‘ ‘tuna» ?
Si alguien desea ingresar al grupo, se presenta en nuestra sede en horas de en sayo. EL examen de aptitudes musicales determina la admisión. Una vez presentado el examen la aspirante es invitaba a observar al grupo desde «cerquita», durante uno o dos meses Esto con el fin de que la aspirante se forme una idea más exacta de lo que es la ‘Tuna. Después de este período, la aspirante entra en el período de prueba. En este tiempo, nosotras Observamos las cualidades humanas y artísticas. Las reacciones de la recién ingresada, qu« todavía no es miembro activo en las asambleas y no lleva aún la ‘beca» que la distingue como Tuna.