
Manejo de datos y ética en la investigación javeriana
La Universidad Javeriana, en cabeza de la Vicerrectoría de Investigación, continúa impulsando las buenas prácticas investigativas en la institución a través de actividades y capacitaciones dirigidas a la comunidad académica.
La ética es un elemento esencial para generar credibilidad y confianza en el público alrededor de quienes realizan investigación científica. Es así como, con el fin de garantizar la calidad de los proyectos investigativos, no solo en procesos metodológicos sino también éticos, la Pontificia Universidad Javeriana viene realizando actividades que promueven las buenas prácticas en la cotidianidad académica e investigativa.
Desde el 2014, la Vicerrectoría de Investigación de la Universidad estableció la directriz sobre los Comités de Investigación de Ética (CIE) aprobada por el Consejo Académico. Este documento identifica a esos grupos como los encargados de estudiar los proyectos de investigación, creación, innovación y desarrollo tecnológico a nivel de las facultades e institutos de la Universidad. Entre sus consideraciones, evalúan que cada proyecto cuente, entre otras condiciones, con los estándares éticos pertinentes.
“Los comités deben poner especial atención a los problemas éticos que puedan surgir de la realización de los proyectos, velando por la preservación del bienestar de los sujetos de estudio y asegurando que los proyectos no tengan consecuencias ambientales o sociales adversas, en un marco de aseguramiento del rigor y cumplimiento de estándares nacionales e internacionales de la investigación”, señala la directriz.
REDCap es un programa que facilita la captura, el almacenamiento y la gestión de los datos proteger la información recolectada en procesos investigativos.
Desde el 2018, el trabajo de la Vicerrectoría de Investigación, en cabeza de la Dirección de Investigación, ha estado encaminado a estructurar un plan de fortalecimiento de los comités y de las capacidades investigativas a nivel institucional. “Inicialmente hicimos visitas a todas las facultades para conocer cómo gestionaban los proyectos de investigación e identificamos que, si bien hay claridad acerca de la revisión del componente metodológico, científico y técnico de los proyectos, hay muchos vacíos en el conocimiento del componente ético”, comenta Erika Ospina, de la Dirección de Investigación.
Así, con la identificación de oportunidades de mejoras en las facultades en materia de ética en la investigación, para el 2020 la Dirección de Investigación puso en marcha la promoción y capacitación de conductas responsables e integridad científica, teniendo como base los lineamientos internacionales, pues según explica Ospina, las universidades en Latinoamérica tienen un marco regulatorio menos riguroso que las instituciones en Estados Unidos o Europa. En esos países, las universidades deber contar, de acuerdo con normativas gubernamentales, con programas y códigos de conducta responsable en investigación que incluye políticas, procedimientos y capacitaciones en temas de cuidado y uso de animales; autoría y publicaciones; investigación colaborativa, conflictos de interés, uso y manejo de datos; sujetos humanos, y ambientes propicios para la investigación, entre otros.
Como resultado de esta iniciativa, el año pasado se llevaron a cabo tres webinars. El primero ‘Consentimiento informado: consideraciones éticas y elementos para su elaboración’, presentado por Fernando Suárez-Obando, director del Instituto de Genética Humana de la Facultad de Medicina. El segundo, ofrecido por Álvaro Ruíz Morales, profesor de la Facultad de Medicina y especialista en medicina interna y en epidemiología, quien abordó el tema de ‘Autoría en Investigación’, aclarando todos los elementos relacionados con las responsabilidades y los aspectos éticos al momento de otorgar y recibir autorías en las publicaciones científicas. Y, finalmente, ‘Datos en Investigación: ética y rigurosidad científica’, expuesto nuevamente por Fernando Suárez-Obando, el cual estuvo orientado a temas como el tratamiento de datos de investigación, almacenamiento, custodia y consideraciones para compartirlos y publicarlos.
Capacitación sobre manejo de los datos
Adicionalmente, la Dirección de Investigación ha favorecido el acceso a capacitaciones en línea a través de la plataforma CITI (Collaborative Institutional Training Initiative), poniendo a disposición cursos con acceso a certificaciones en temas relacionados con la conducta responsable en investigación. Y, con el fin de seguir dando vía al propósito de hacer de la Pontificia Universidad Javeriana una institución líder en calidad investigativa, el 18 de marzo se realizó la capacitación para el uso de REDCap (Research Electronic Data Capture), un programa que facilita la captura, el almacenamiento y la gestión de los datos para que, en últimas, se proteja mejor la información recolectada en procesos investigativos.
El taller, que estuvo a cargo de Suárez-Obando, contó con la participación de profesores y administrativos javerianos, y presentó un componente teórico y otro práctico sobre el uso de la plataforma. Con la capacitación para el manejo del software, la Dirección de Investigación continúa aportando al fortalecimiento de una ciencia de calidad.
Los datos deben ser cuidados
Dentro de los riesgos relacionados con las malas prácticas en investigación está la pérdida e inadecuado uso de los datos. REDCap es una plataforma web que permite la creación y manejo de bases de datos de forma segura en línea. Además, señala Ospina, facilita el trabajo colaborativo y la importación y exportación de datos con Excel y programas estadísticos como SPSS, R, Stata, entre otros.
Este programa informático, diseñado y desarrollado en la Universidad de Vanderbilt, fue creado inicialmente para proporcionar seguridad a los datos clínicos. “Sin embargo, nosotros nos dimos cuenta de que esta herramienta puede ser utilizada de manera práctica en cualquier área del conocimiento”, complementa la integrante de la Dirección de Investigación de la Javeriana.
La Universidad está preparada para empezar a hacer uso de este software, esto queda demostrado no solo con la adquisición del programa, para uso institucional y de forma exclusiva, sino también con los esfuerzos implementados para que los datos –grabaciones, fotos, registros y cualquier tipo de documento–, puedan estar almacenados en servidores propios de la Javeriana, sin exponerse a la pérdida y manejo inadecuado de la información.