
Murió el Padre Vicente Andrade, S. J.
*Foto: El P. Vicente Andrade, S.J., habla en el XIII Congreso Nacional de la UTC, en Cali.
El pasado 9 de abril murió el P. Vicente Andrade, S.J., fundador de la carrera de Administración de Empresas, promotor del programa de Capacitación Laboral en la Universidad Javeriana y cofundador de la UTC (Unión de Trabajadores de Colombia). El P. Andrade, en el momento de su muerte, dictaba cátedras de Ética Profesional en la Carrera de Administración de Empresas y en la Facultad de Medicina.
Muy estimado por la claridad de sus ideas frecuentemente expuestas en Revista Javeriana, en El Catolicismo y en un tiempo en el noticiero de televisión de Arturo Abella, asesor de la Conferencia Episcopal y de la UTC, nació en Bucaramanga el 10 de abril de 1907.
Inició sus estudios en el Colegio de San Bartolomé, e ingresó en la Compañía de Jesús el 15 de abril de 1922; realizó sus estudios de humanidades en el Colegio de María Inmaculada, en 1924 y 1925 y los de Filosofía en el Colegio Máximo de la Compañía de Jesús, de 1926 a 1929.
Inició el estudio de la Teología en Milltown Park, Dublín, en 1931, pasando después a la Universidad Gregoriana de Roma, donde recibió el 4 de enero de 1938 el doctorado en Teología Moral. En ese mismo año fue nombrado profesor en las Facultades Eclesiásticas de la Universidad Javeriana en la cátedra de su especialidad, cargo que desempeñó durante 20 años hasta 1958.
Siendo profesor recibió el encargo de colaborar en la Acción Social Católica. En compañía del P. Francisco Javier Mejía, S.J., iniciaron la organización de los grupos obreros de lo cual nació la UTC, (Unión de Trabajadores de Colombia), entidad que asesoró desde 1946 hasta 1971. Pasó después a la Residencia de San Pedro Canisio, Casa de Escritores, donde unía al trabajo de bibliotecario el ser capellán del Gimnasio Campestre y Rector del Colegio de Nuestra Señora de la Asunción. En 1983 fue nombrado asesor de CETRAC.
Con la claridad mental adquirida en largos años de enseñanza universitaria, frecuentemente presentó los grandes principios de las Encíclicas Sociales en sus escritos, el último de ellos publicado el día de su muerte en el Catolicismo sobre «Sombras y luces en las cárceles colombianas».
En su mesa de trabajo quedó un artículo escrito a lápiz, las calificaciones de los últimos parciales en la Universidad y un paquete de revistas para los presos. Murió de pie, trabajando. Reciba nuestro sencillo homenaje y nuestra oración. A su entierro acudió el Sr. Presidente de la República, Dr. Belisario Betancur, Cardenal Aníbal Muñoz Duque, Mons. Mario Revollo, Mons. Héctor Rueda Hernández, Arzobispo de Bucaramanga y Presidente de la Conferencia Episcopal, Mons. Rodrigo Escobar, Obispo de Girardot, los obispos auxiliares de Bogotá, D.E., más de 180 sacerdotes y sobre todo innumerables personas a las cuales ayudó en su meritoria vida.