Este año, la celebración del día de san Ignacio de Loyola, 31 de julio, y de la Semana del Carisma Ignaciano que la Universidad desarrolló del 26 al 30 de julio, tuvo una connotación especial: la conmemoración de los 500 años de la herida que Ignacio de Loyola recibió en una de sus piernas durante la batalla que libraba en Pamplona cuando era soldado del ejército español, en el año 1521. Fue gracias a este acontecimiento que Ignacio quedó tendido en cama y para pasar el tiempo comenzó a leer la Santa Biblia y libros con la vida de los santos. Lecturas que causaron en él una honda experiencia espiritual y que dieron origen a lo que hoy en día[…]