A lo largo de la vida, en distintos momentos, los seres humanos requerimos de cuidado para enfrentar la enfermedad o la discapacidad, y la respuesta a las necesidades pone en juego la oferta y los recursos de los distintos ámbitos público y privado de producción de bienestar en la sociedad: el Estado, el mercado, la comunidad y las familias. Lo cierto es que predomina el cuidado que proveen los hogares, porque buena parte de las demandas son sencillas y pueden ser resueltas en el espacio doméstico, pero también en sustitución o complemento de lo que el Estado no ofrece y tampoco puede ser comprado en el mercado. Realmente hogar y familia son eufemismos de mujer, porque son principalmente las mujeres[…]