
Un inicio fantastique para celebrar 90 años
Un concierto sinfónico entre músicos de Francia y Colombia, promovido y organizado por la Vicerrectoría del Medio Universitario, dio inicio a la celebración de los 90 años del restablecimiento de la Pontificia Universidad Javeriana.
Con una majestuosa presentación que unió en un mismo escenario a la Orquesta Sinfónica de la Javeriana, al Coro de Cámara y de la Carrera de Estudios Musicales, a estudiantes de Artes Escénicas de la Facultad de Artes y a los jóvenes sinfonistas de Mosela (Jeunes Symphonistes Mosellans), inició la celebración de los 90 años del restablecimiento de la Pontificia Universidad
Javeriana.
El 29 de febrero llegaron al Teatro Cafam de Bellas Artes en Bogotá, aproximadamente mil personas de la comunidad javeriana e invitados especiales para apreciar el intercambio musical y cultural
entre más de 200 niños y jóvenes artistas de Colombia y Francia, quienes interpretaron la ‘Sinfonía Fantástica’ y ‘Lelio o El retorno a la vida’, del compositor francés Héctor Berlioz, en torno al aniversario de los 150 años de su muerte.
El concierto sinfónico fue el resultado de un campamento dedicado a la música romántica francesa que se realizó del 24 al 29 de febrero en el campus de la Universidad Javeriana. Allí 70 niños y jóvenes franceses de diversos orígenes, credos y edades vivieron una inmersión cultural única en unión con la Orquesta Sinfónica Javeriana y el Coro de la Facultad de Artes.
En este campamento musical, donde los jóvenes artistas y sus maestros se comunicaron en español, francés e inglés, se comprobó que la música es el idioma universal que une a la humanidad. “En mi grupo somos doce chelistas, cinco de la Javeriana y siete de Francia, incluida una profesora francesa. Hablamos en “espanglish”, pero cuando se refiere a la música hay términos que son universales y simplemente con mostrar el ejemplo ya nos entendemos. Eso es lo más bonito de la música, que es un lenguaje universal en el que uno se entiende sin necesidad de hablar mucho”, comentó Felipe Galindo, estudiante de sexto semestre de Estudios Musicales con énfasis en Violonchelo y Dirección de orquesta.
Con Felipe coincide Alix Bezia, músico francés de 33 años y asistente de dirección del maestro Oliver Jansen, quien expresó su emoción por participar en este encuentro con tantos músicos de otro país a quienes, sin compartir la misma lengua, la música les permite trabajar juntos.
Y es que la sincronía musical de cada uno de los cinco actos que componen ‘Lelio o El retorno a la vida’ que se apreció en el concierto, se alcanzó en cada uno de los ensayos por grupos de instrumentos y en los generales de toda la orquesta franco – colombiana, dirigida por el maestro en música Luis Guillermo Vicaría, director de la Orquesta Sinfónica Javeriana, gracias a ese trabajo en conjunto y ambiente de confianza que se creó entre los músicos de los dos países.
“Los encuentros entre orquestas juveniles son una actividad de una riqueza enorme, pues cuando dos músicos comparten un atril y uno es de una orquesta y otro es de otra, independientemente
del nivel de los dos, uno toma el liderazgo sobre el otro para darle la mano al otro y apoyarlo. Eso genera una sensación de camaradería y amistad y de trabajo en conjunto para el bien común, que es poder hacer la música bien hecha y de la mejor manera posible”, comentó el maestro Vicaría quien ensayó con los más de 200 niños y jóvenes, franceses y colombianos, alrededor de cuatro horas diarias durante la semana del campamento musical.
“Esta es la primera vez que una universidad colombiana emprende un proyecto de tal magnitud, con un objetivo social y cultural que le permite fomentar, no solo el diálogo y el intercambio de saberes a nivel internacional, sino la formación artística abordada desde diferentes perspectivas, en un lenguaje común que es la música”, aseguró Carolina Gómez, directora del Centro de Gestión Cultural y directora general del proyecto Fantastique.
“La experiencia ha sido muy interesante y pedagógica, porque tener a estudiantes de la Universidad que tienen mucho más nivel que yo me permite tener más motivación y dar más de lo que tengo para seguir mejorando. Los javerianos han sido como profesores, siempre están pendientes de mí, me ayudaron a entender algunos pasajes orquestales que no son fáciles de tocar y en el ensayo general ya todo suena mucho mejor”, expresó Eulalie Merel, estudiante del conservatorio de Metz, quien con 15 años toca el contrabajo.
La hora de Fantastique
Lelio, el héroe de la obra del Retorno a la vida, fue representado por un actor con monólogos escritos por Berlioz, adaptados al español por el Centro de Gestión Cultural e interpretado por el estudiante de la carrera de Artes Escénicas, Juan Pablo Herrera Montoya.
La puesta en escena, el concepto visual y multimedia que no se limitó al escenario e involucró al público asistente, corresponde a un músico del siglo XXI quien, a través de la música programática, evocó en los espectadores del concierto sinfónico las vivencias, emociones y sentimientos más profundos de su pena amorosa.
“Eso es lo más bonito de la música, que es un lenguaje universal en el que uno se entiende sin necesidad de hablar mucho”, Felipe Galindo.
Fue así como la representación de la Sinfonía Fantástica y Lelio cobró vida de una forma espléndida a través de las voces de los coristas javerianos y del armónico trabajo musical de las dos orquestas, enriquecidos por la representación visual a lo largo de la sinfonía que llevó al público al punto más alto de sentimiento cuando al final de la obra, la orquesta franco-colombiana entona las notas de Colombia tierra querida, de Lucho Bermúdez. El escenario se pintó con el amarillo, azul y rojo de los anfitriones, que se mezcló con el azul, blanco y rojo de quienes en esta ocasión
fueron visitantes, pero que en el 2021 esperan a los colombianos para vivir la segunda fase de este encuentro en uno de los escenarios más emblemáticos para la música clásica en el mundo: El Arsenal, en la ciudad de Metz.
