Apuesta por el desarrollo sostenible del país desde la formación doctoral
Uno de los principios que fundamenta la apropiación social del conocimiento es el reconocer el contexto de las personas, comunidades y organizaciones que permite una lectura lo suficientemente rica para construir propuestas que tengan un verdadero impacto sobre su entorno y sus realidades. Esto implica realizar un ejercicio permanente por conocer su situación, problemas y necesidades de tal manera que sean el insumo principal para la construcción de soluciones coherentes y pertinentes.
Así mismo, los programas doctorales ofrecen beneficios representativos para quienes llegan a este nivel de formación, ya que amplía el panorama de su ejercicio profesional, le permite responder a desafíos disciplinares, interdisciplinares y transdiciplinares, consolidar competencias investigativas, posicionarse y liderar iniciativas en su campo, profundizar en componentes estratégicos de estudio y orientar a otros investigadores en dinámicas semejantes.
Por ejemplo, Willintong Marín Rodríguez, estudiante del doctorado en Ingeniería, con su trabajo doctoral sobre uso de herramientas de visión por computadora y aeronaves no tripuladas UAV para la identificación de palma amazónica (Asai, Seje y Moriche) explica que: “me genera una gran motivación saber, que mediante la investigación y el desarrollo de tecnologías se pueda aportar a la economía de la región, a la participación económica de comunidades indígenas y campesinas y a su vez al sostenimiento del bosque mediante el aprovechamiento sostenible y no a la explotación de este.
Piensa lo mismo la estudiante del doctorado de Estudios Ambientales y Rurales, Blanca Andrea Rodríguez: “lo que me motiva a hacer el doctorado es tener la oportunidad de hacer investigación y realizar un proyecto en ecología con una visión interdisciplinaria que me permita comprender los fenómenos y las problemáticas de la sociedad-naturaleza de forma más holística e integrada en pro de pensar en diferentes alternativas o explicaciones”.
El director de Programas Académicos, Carlos Rico explica que “para una comunidad educativa como la Javeriana se hace fundamental diseñar y desplegar una oferta posgradual que sea pertinente frente a las diferentes necesidades que tiene el país. Es por ello que los doctorados son esenciales para continuar dando cumplimiento a la misionalidad de las universidades”.
Es en este marco misional donde la Universidad desarrolla su oferta académica doctoral desde un modelo que le permite, bajo el criterio de una autoevaluación permanente, garantizar la calidad y responder a las necesidades del contexto social. Esta labor ha facilitado fortalecer la oferta académica de doctorados desde una mirada amplia, como lo señala Alexandra Pomares, directora de Investigación: “Uno de los principios que fundamenta la apropiación social del conocimiento es el reconocer el contexto de las personas, comunidades y organizaciones que permite una lectura lo suficientemente rica para construir propuestas que tengan un verdadero impacto sobre su entorno y sus realidades”.
Hoy, la Javeriana cuenta con 16 doctorados (13 civiles y 3 eclesiásticos) que trazan grandes líneas para ubicarla en la exploración y transformación social del futuro: las relaciones entre la ingeniería y la salud, (PhD. en Ciencia y Tecnología de Materiales), los diálogos de las tecnologías, la comunicación y las artes (PhD. en Comunicación lenguajes e información), la presencia de la solidaridad en el centro de la economía (PhD. Economía), la vinculación entre democracia y ciudadanía (PhD. Ciencias Jurídicas), la incidencia de la ingeniería en el mundo que vivimos (PhD. Ingeniería), nuevas formas de concebir la epidemiología clínica y el cuidado de la casa común (PhD. en Estudios Ambientales y Rurales), entre otros.