
Crear esperanza a través de la acción
La Organización Mundial de la Salud promueve cada 10 de septiembre el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, invitando a que unamos esfuerzos, generemos conciencia y acciones de prevención y promoción alrededor de un mensaje. El elegido para el periodo 2021-2023 es: «Crear esperanza a través de la acción», el elegido para el período 2021-2023. Esta esperanza es retada al encontrar, según cifras de la OMS, que cada año más de 703.000 personas se quitan la vida, lo que corresponde a una muerte cada 40 segundos. Ante este panorama, se suma la enorme preocupación por la falta de recursos para la atención en salud mental en nuestro país, la insuficiencia de los mismos o la necesidad de direccionar los existentes hacia programas más eficaces. Acorde a la Organización Panamericana de la Salud, el gasto en servicios de salud mental en todo el mundo representa un 2.8% del total destinado a la salud en general y en países de bajos ingresos, como el nuestro, representa el 0,5% del presupuesto general en salud.
No obstante, el reporte del panorama sociodemográfico de la juventud en Colombia del DANE, hecho en septiembre de 2020, muestra que el 55% de los jóvenes ha hablado con amigos y familiares para sentirse mejor y el 33.4% considera que la situación económica del país será mejor dentro de 12 meses. Por otra parte, el Centro de Asesoría Psicológica y Salud de la Universidad Javeriana reportó entre enero y septiembre de este año 20.215 participaciones de estudiantes, profesores y empleados en las diversas estrategias de cuidado, acompañamiento y bienestar. Además, se cuenta con un equipo de 29 estudiantes acompañantes que hacen parte de la estrategia de pares para pares ‘Habla con tu almohada’, la cual busca favorecer el desarrollo emocional, relacional, de vida saludable y aprendizaje.
Lo anterior, nos permite señalar que, a pesar de la situación crítica en el mundo y en el país frente a la salud mental, hay señales que ponen en evidencia una visión positiva de futuro en nuestros jóvenes, centrada en la capacidad adaptativa, en una tendencia a la superación, en el reconocimiento evidente entre salud y amistad, en el reflejo de ese sentimiento positivo de “felicidad” que puede encontrarse al estar entre amigos o pasar momentos con la familia.
Les invito a ser creadores de esperanza, a hacer una apuesta por un cuidado colectivo y reconocer que en el vincularse con otros se teje la esperanza como motor de la vida.
¿Cuál es entonces nuestro rol en la Universidad como creadores de esperanza a través de la acción para promover la salud mental y ser un entorno protector?
La realidad del sistema de salud y el aumento de solicitud de citas para psicología y psiquiatría en las EPS ratifica que el abordaje de la salud mental trasciende la responsabilidad de la Universidad. Nuestro rol, entonces, es promover una formación integral que reconoce el potencial de cada estudiante para el desarrollo de sus capacidades en su ser y quehacer. Es reconocernos como cuidadores legítimos que acogemos las necesidades de nuestros estudiantes y favorecemos las mejores condiciones para su acompañamiento; parte de asumirnos como co-responsables en la promoción de la salud mental, acompañando al estudiantado en sus procesos de aprendizaje y adaptación que, sin duda, se encuentran permeados por situaciones relacionadas con su vida emocional, relacional.
Tomar acción por la promoción de la salud mental parte de reconocer que en la Javeriana la inversión de recursos de bienestar asciende al 9% de su presupuesto total, cuando lo exigible por la Ley 30 es el 2%. Es así como la Javeriana, inspirada en la promoción de la salud y prevención de la enfermedad, cuenta con estrategias de educación para la salud: ha ideado nuevos modelos de atención y acompañamiento en los servicios emocionales individuales; ha implementado el Triage de Psicología en función de niveles de riesgo y problemáticas; se declaró desde el 2003 como una universidad que promueve la salud; construyó un modelo para la comprensión, la promoción de la salud mental y la prevención de afectaciones relacionadas con la misma, y ha concebido una propuesta de red de cuidadores para empleados y estudiantes que se reconoce como un tejido vivo de interacciones, apoyo y acompañamiento solidario a la comunidad educativa javeriana.
Les invito desde nuestros diversos roles a ser creadores de esperanza, a hacer una apuesta por un cuidado colectivo que fortalece la escucha, la orientación. A definir límites y alcances en la relación pedagógica y reconocer que en el vincularse con otros se teje la esperanza como motor de la vida, impulsándonos a construir el presente, a entregarnos con compromiso en lo que hacemos y a disponernos con una actitud de amor, libertad, respeto y empatía en la labor formativa.