El final del año llega con la Navidad, ese periodo especial en el que los niños y la familia tienen un lugar especial, un tiempo donde volvemos a tradiciones que hemos aprendido y nos dan pie pare encontrarnos y celebrar. Entre nosotros es tiempo de luces, de natilla y buñuelos, de novenas y villancicos. Es un tiempo especial, mágico y poético, que nos permite también cerrar el ciclo del año que pasó y abrirnos a la novedad de la vida, de lo nuevo. Ahora bien, este es el tiempo de la espera, del adviento, que apunta a un acontecimiento en particular, una conmemoración asociada a la Nochebuena que, en el caso de los creyentes, supera el simple recuerdo del acontecimiento[…]