
Relacionamiento, tejer redes y ser puente, será el sello de María Adelaida Farah en la VERI
Uno de los primeros eventos solemnes de este año en la Universidad Javeriana fue la posesión de María Adelaida Farah Quijano como vicerrectora de Extensión y Relaciones Interinstitucionales –VERI-. La ceremonia se llevó a cabo el 3 de febrero en el auditorio Félix Restrepo, S.J. con la presencia del P. John Jairo Rivera Montoya, S.J., en nombre del P. Hermann Rodríguez Osorio, S.J., provincial de la Compañía de Jesús y Vice Gran Canciller de la Universidad; del padre Jorge Humberto Peláez Piedrahita, S.J., rector de la Javeriana y demás directivos de la Universidad.
Hoy en la Javeriana conversó con María Adelaida sobre la proyección de la VERI para los próximos tres años.
¿Cuál es el principal reto que tiene la Vicerrectoría de Extensión y Relaciones Interinstitucionales?
María Adelaida Farah: El principal reto es que es una Vicerrectoría que teje redes, construye puentes, hace fluir información, relacionamientos. Es una Vicerrectoría esencialmente de relacionamiento, así que es necesario potenciar mucho más eso, tanto al interior de la misma, como con las otras vicerrectorías, unidades de la Rectoría y con las facultades e institutos. Entonces, el reto principal es ese: seguir fortaleciendo y tejiendo redes de colaboración, de alianzas y ayudar a seguir potenciando la misión, visión y las megas de la Universidad.
¿Cuáles son las oportunidades de acción que ha identificado en las unidades que componen la VERI?
M.A.F: Tenemos cinco áreas: Educación Continua, Consultorías, Internacionalización, Egresados y Movilidad. Todas ellas son de relacionamiento.
En Educación Continua la idea es fortalecer una oferta que cubra todas las áreas de conocimiento de la Universidad, pero sobre todo que Educación Continua esté muy fuerte en el ecosistema de aprendizaje. En la idea de educación y formación a lo largo de la vida, la educación continua tiene un papel muy importante, así que debemos fortalecerla en unión con los programas académicos.
Con Consultorías hay una apuesta por la sostenibilidad de la Universidad, pero también debemos visibilizar más y enfocarnos en el aporte a la sostenibilidad social y ambiental de las consultorías que hacemos. Si nos enfocamos en pensar cómo las consultorías de la Universidad aportan a la sostenibilidad económica, social y ambiental podemos ser mucho más potentes y marcar el diferencial de cómo la Javeriana hace consultorías desde su enfoque, su misión, su visión, sus ideales, sus megas.
En temas de internacionalización es que la Dirección sea un tejedor de redes para ayudar a potencializar todas las funciones sustantivas de la Universidad. Este es un eje fundamental para los programas académicos, la investigación, la consultoría, la educación continua y las áreas académicas de la Javeriana.
En Egresados debemos ver cómo los capítulos nacionales e internacionales se unen a la internacionalización, a los temas territoriales, a construir territorios, a fortalecer el trabajo colectivo, la sostenibilidad; ya no solo es un tema de relación social, que es importante, sino cómo pueden los egresados aportar a los procesos de la Universidad, sabiendo que ellos son el cuarto estamento.
En el tema de movilidad nacional e internacional de estudiantes es cómo esto contribuye a la formación integral intercultural, humanista tanto en los estudiantes entrantes como en los que salen del país.
Creo que puedo aportar y mantener el legado del padre Álvarez.
¿Cómo proyecta la VERI en los próximos tres años?
M.A.F: Quiero que se vea que es una Vicerrectoría que articula, que digan cómo esta Vicerrectoría los ayuda a tejer redes, que genera puentes, y que podamos visibilizar cómo estamos haciendo el relacionamiento, qué significa eso y qué significa en la práctica de las facultades, de los institutos. Ese es uno de mis sueños. Lo otro es todo el tema de género, de perspectiva de género. Yo quiero que la VERI sea un actor significativo en la construcción y tejido de la Red de Voces Javerianas, que aportemos mucho a cómo esa Red se hace realidad en la Universidad y cómo una Vicerrectoría de Extensión y Relaciones Interinstitucionales contribuye a generar realmente una universidad libre de violencias y discriminaciones, a la cero tolerancia a estos comportamientos.
La otra parte de género es que en las apuestas que tenemos de educación continua, consultorías, movilidad, internacionalización y egresados que se construyen con otras unidades, lo hagamos con una perspectiva consciente de género. Eso no es automático y lo iremos trabajando.
Como mujer ¿cuál será el sello que le pondrá a la Vicerrectoría?
M.A.F: Lo que dije anteriormente es uno, pero el tema de género no es solo por ser mujer, lo hago porque es un tema que he trabajado, que me interesa. Por ser una mujer académica he trabajado todo lo rural y también traigo esa conceptualización y lo que he hecho con esta visión. Entonces el hecho de ser mujer si es interesante, porque le da un toque distinto, pero no es un toque porque es mujer, sino es una concepción más integral.
Así mismo, el sello principal será el de relacionamiento, de tejer redes, ser puente, generar diálogos para el tema de género, de territorios, de las facultades, con las otras vicerrectorías. Esto es un tema muy mío que lo hice en la Facultad Estudios Ambientales y Rurales. Hacerlo muy cualificadamente y no forzarlo. Ese es un sello particular que quiero poner.
¿Qué fue lo primero que pensó cuando supo que fue la persona elegida para el cargo?
M.A.F: Me dio mucha alegría y pensé en qué bueno que pueda seguir poniendo toda la trayectoria que he tenido, los aprendizajes y los conocimientos en este nuevo cargo al servicio de la Universidad, de la educación y del país. También siento que mi trayectoria ha estado muy marcada por ser perseverante, de mucho estudio, de estar enfocada. Si me voy 30 años atrás no podría decir que dije: quiero ser vicerrectora, ni ser decana, pero sí siento que este nombramiento es fruto de la trayectoria que he hecho, ha sido un paso a paso. A mí la Universidad me ha dejado ser María Adelaida y formarme como María Adelaida en toda su integralidad, me ha permitido florecer. Cuando llegó el momento de las consultas para el cargo pensé que podría ser una buena vicerrectora, porque desde la Facultad he tenido una interrelación muy fuerte con la Vicerrectoría y creo que puedo aportar y mantener el legado del padre Álvarez con su equipo. Luego supe que la gente me había postulado y que quedé en la terna y me sentí agradecida, porque ya era un reconocimiento estar ahí. Pero cuando llegó la carta del nombramiento fue algo muy bonito, y creo que fue un reconocimiento no solo a mí, sino también a toda la Facultad. La gente me ha recibido muy bien en la Vicerrectoría y fuera de ella también. Espero hacer muy bien el trabajo.