“La criminalidad y la violencia parecen ir en aumento (…), se extiende por todas partes la alarma del desempleo, de la elevación del costo de vida y de una creciente desilusión, especialmente, entre los jóvenes. Hoy el ser humano experimenta, a nivel tanto individual como social, un inmenso vacío espiritual que ni los progresos tecnológicos ni la ideología materialista pueden llenar”. Estas palabras, que tienen total vigencia hoy, fueron pronunciadas por el padre Pedro Arrupe, S.J. en Padua, Italia, el 25 de agosto de 1977 en la conferencia ‘¿Es la Iglesia todavía portadora de las esperanzas de los hombres?’, cuando se desempeñaba como superior general de la Compañía de Jesús, e hicieron parte del recital poético musical en el que[…]