Pasados 16 años de su muerte, ocurrida el 24 de mayo de 2006, a los 84 años de edad, Hernando Arellano Ángel no es alguien conocido para muchas personas de la actual comunidad educativa de la javeriana. Sin embargo, lo es para quienes hemos estado vinculados a la Universidad desde hace más de veinte años: su nombre nos hace pensar en ese hombre de buena estatura y cabello canoso, de andar pausado y rostro amable que a media mañana bajaba de su oficina, localizada en el Edificio Central, a la cafetería de profesores, generalmente acompañado por uno o dos amigos, para tomar un descanso y comer algo. Siempre amable y gentil, generoso y sencillo, a todos saludaba con una sonrisa.[…]