"una reflexión sobre el concepto de la masculinidad, mediante experiencias vivenciales y espacio de conversación, que permitan a los participantes darse cuenta del lugar en el que se ubican en relación con su masculinidad."

Álvaro Salazar y David Durán Valencia

Profesionales del Centro de Bienestar, Javeriana Cali

El Centro de Bienestar que forma parte de la Vicerrectoría del Medio Universitario (VMU) de la Javeriana Cali, propone desde el segundo semestre del 2021 una experiencia reflexiva para abordar cómo la masculinidad patriarcal afecta la salud mental de los hombres y genera efectos sobre los vínculos con las mujeres y otros hombres. Esta propuesta es nombrada como “¿Es cuestión de hombres?, Un encuentro de masculinidades”, aunque posteriormente el nombre se transformó en: “Encuentro de masculinidades”, cuando nos dimos cuenta de que el peso de la representación de la masculinidad hegemónica atraviesa a hombres y mujeres. La intención principal con esta propuesta de la VMU ha sido la de sensibilizar y visibilizar a nuestra comunidad en estas formas de violencia del machismo que propicie un cuestionamiento a esas formas de relación que propone la cultura patriarcal, generando una implicación subjetiva en la deconstrucción de esa masculinidad tradicional que proporcione perspectivas diferentes para la expresión del “ser hombre” en la vida universitaria. El primer obstáculo que enfrentamos, y que sabíamos que estaría presente, fue el de la ausencia de un interés consiente de nuestros estudiantes a dar cabida a este tema en su formación integral. Allí entendimos que era importante ir al campus, encontrarnos donde interactuamos con esa masculinidad, hacer presencia desde el cuestionamiento a los significados atribuidos a las cosas, los espacios, roles y las dinámicas cotidianas, generando una tensión necesaria para replantear el sentido que desde la cultura se ha reproducido sobre ese modo de ser hombre conquistador, suficiente por sí mismo, proveedor, controlador, inexpresivo, privado en sus emociones y dolores. Allí empieza entonces la idea de que esta propuesta de encuentro de masculinidades tuviese incidencia en los escenarios donde ocurren las dinámicas universitarias en aquellos grupos cautivos propios de la VMU y en el aula académica donde ocurren los encuentros de sujetos atravesados por el discurso de esta masculinidad tradicional. 

El encuentro de masculinidades es una propuesta pedagógica que le apunta a la transformación subjetiva de la propia masculinidad y a la promoción de la cultura del cuidado que permita el reconocimiento de esas diversas masculinidades que se viven en el contexto universitario de la Javeriana Cal, más allá de ese punto de vista tradicional que suele reproducir formas violentas de interacción, donde la potencia como señal de la propia valía, la forma dominante de vivir, la imposición de mandatos que son privilegios y causan sufrimientos así como la anestesia emocional frente a los conflictos de la vida entorpecen la posibilidad de asumir autónomamente el bienestar psicológico y el fortalecimiento de la salud mental en los hombres de nuestra comunidad. 

Entre los objetivos que se plantean para las intervenciones de “encuentro de masculinidades” se busca generar una reflexión sobre el concepto de la masculinidad, mediante experiencias vivenciales y espacio de conversación, que permitan a los participantes darse cuenta del lugar en el que se ubican en relación con su masculinidad. Se quiere propiciar experiencias que permitan la reflexión sobre la masculinidad desde una mirada diferente a la del machismo que promueve relaciones y comportamientos misóginos en la relación entre hombres y mujeres. Para esto, es importante que la personas que contribuyen a la creación y organización de las intervenciones, sientan el llamado a reflexionar sobre el tema, de ahí que los practicantes son los encargados de generar estas experiencias, teniendo en cuenta que son estudiantes que pueden facilitar la incorporación de sus vivencias, sentir y experiencias de las diferentes dinámicas alrededor la masculinidad y relacionarlas con sus pares. A partir de esto, hasta el momento se ha trabajado desde tres ejes. 

Primero, el encuentro o círculo de masculinidades, es un espacio en donde los estudiantes de la comunidad pueden acercarse a conversar sobre temas o situaciones donde se tensionan y se cuestionan la forma en la que se relacionan con su masculinidad. Segundo, intervenciones en campus, en donde se proponen acciones que permitan la exposición y reflexión de situaciones concretas en el campus en donde se sostiene la masculinidad tradicional, estos encuentros se realizan en diferentes espacios de las instalaciones de la Universidad, y pueden participar todos los integrantes de la comunidad Javeriana. Tercero, la intervención con grupos cautivos, en donde se organiza una experiencia vivencial, de acuerdo con las características particulares de un grupo específico de la universidad, con el fin de generar una intervención que contribuya al desarrollo y la construcción del concepto de la masculinidad desde el propio grupo. 

Ahora bien, durante estos tres años se han realizado diferentes intervenciones con resultados y reflexiones significativas para la comunidad, entre las que se encuentran “El regalo de una flor” donde hombres regalaban flores a otros hombres, para reflexionar sobre lo que implica desde la masculinidad el regalar o recibir objetos que están asociados con regalos para mujeres. Asimismo, la intervención “La huella de nuestra masculinidad” que buscaba favorecer la reflexión sobre la vivencia de la masculinidad mediante una experiencia con otros, que permitiera a los integrantes del grupo Huellas reelaborar el significado de “ser hombre”. En esta experiencia particular se contaba con un porcentaje mayor de mujeres frente hombres, mostrando inicialmente la importancia del tema con relación a las mujeres y como también las atraviesa desde otras perspectivas, seguido del darse cuenta de que la masculinidad no es un concepto propio o particular de los hombres, sino que está inmerso en la comunidad y tiene efectos en todos de diferentes maneras, independientemente del género. También, se han realizado otras intervenciones como “Bailemos, ¿Tú me llevas?” en donde se logró favorecer una experiencia en los estudiantes de la comunidad, que permitió explorar los roles de género de la masculinidad en el baile, específicamente en la salsa, aquí los hombres vivieron la experiencia de dejarse llevar por sus parejas, así como bailar con otros hombres para reinterpretar dichos esquemas culturales que se encuentran dentro del baile. 

A manera de conclusión, con las experiencias vividas en el espacio de “Encuentro de masculinidades”, nos damos cuenta (participantes y facilitadores) que existe un reconocimiento inicial de la afectación del machismo en nuestra salud mental y en el cómo construimos la subjetividad desde donde nos relacionamos. Sin embargo, las intervenciones vividas nos permiten identificar la otra parte donde identificamos cómo se reproduce y se sostiene esa masculinidad patriarcal de forma implícita, en lo que hablamos, en lo que creemos, la manera como nos relacionamos, en la expresión de la afectividad y en la apertura a la fragilidad. Es por esto, que el encuentro cobra sentido en cuanto se genera una conciencia frente a la reflexión que nos permite tensionar el significado existente de la masculinidad y propiciar otras posibilidades de vivirla buscando favorecer el bienestar y cuidado de la comunidad Javeriana. Esperamos que siga cobrando fuerza en los diferentes escenarios de clases, espacio de la VMU y demás espacios del campus universitario, para así aportar en la prevención de violencias, inclusión de formas diferentes de exponer la masculinidad y seguir propiciando relaciones equitativas en la comunidad. 

Nota: “El artículo fue escrito por Álvaro Salazar y David Durán Valencia quienes estuvieron liderando la propuesta en el periodo 2023-1. Es importante mencionar que en esta experiencia han participado como facilitadores en semestres anteriores Andrés Insuasti, David Molina, Margarita Vargas y Juan José Serna, a quienes agradecemos por sus aportes y compromiso con esta práctica pedagógica desde su proceso de formación.”