Septiembre 2023 | Edición N°: 1391
Por: Nicolás Morales Thomas | Director de la Editorial Pontificia Universidad Javeriana

El 7 de septiembre la Editorial Pontificia Universidad Javeriana y la Vicerrectoría del Medio Universitario presentaron el libro Discursos Universitarios: Textos escogidos de Peter-Hans Kolvebanch, S.J. A continuación, se recogen las palabras del director de la Editorial.


El historiador Ingo F. Walther nos recuerda que, a diferencia de las antiguas creencias politeístas, el cristianismo es una religión del libro: la Edad Media nos dio poderosas muestras de ello con los talleres artesanos, muchos situados en monasterios, que proveyeron verdaderas joyas de la iluminación, hoy obras patrimonio de la humanidad. Eran libros de plegarias, biblias, calendarios con oraciones de uso privado, romances alegóricos para la edificación de laicos, etc. En este sentido, la imprenta fue definitiva en llevar el mensaje de esperanza del cristianismo, porque sistematizó el conocimiento sagrado y construyó verdaderos imperios editoriales con colecciones de libros tan influyentes como populares. De este modo, el libro con contenido religioso circuló ampliamente por muchas regiones, incluida Latinoamérica, fenómeno que continúa hasta hoy en día.

En Colombia, un grupo de historiadores editoriales ha iniciado estudios sobre el impacto de las colecciones editoriales en el país. Juan David Murillo, investigador del Instituto Caro y Cuervo, ha rastreado el origen de esa silenciosa revolución que muestra una gran transformación en el paisaje cultural colombiano. Las preguntas son infinitas: ¿Cómo se construye una colección? ¿Qué elementos la conforman? ¿Qué retos supone idearla, producirla y hacerla continua? Una colección es, en primera instancia, un formato estable y es un cierto juego tipográfico que tiene continuidad. Eso es lo primero que salta a la vista. En segunda instancia, una colección es parte también de un proyecto intelectual, que puede ser individual o colectivo. Fundamentalmente, una colección es un itinerario intelectual, como es nuestro caso. Libro tras libro se construye una propuesta de interpretación del mundo con ejes temáticos, disciplinares o estéticos.

Nicolás Morales, director Editorial Javeriana; María Adelaida Farah, vicerrectora académica; P. Luis Fernando Múnera, rector; P. Libardo Valderrama, vicerrector del Medio Universitario; y Roberto Vela, coordinador de Identidad de la Vicerrectoría del Medio Universitario.

Una de las características esenciales de una colección es la frecuencia: se trata de una apuesta continua por antonomasia que apunta a diversos objetivos, como puede ser contribuir a formar un canon o ser un amplio espacio de debate intelectual. Este es el caso de la Selección de Literatura Colombiana de Samper Ortega, una colección pensada en los años treinta en plena República Liberal en Colombia, o de la colección Tierra Firme, creada en 1934 por el editor Daniel Cosío Villegas, que marcó una generación intelectual y fue la base del actual Fondo de Cultura Económica. Si bien a Cosío se le recuerda por haber fundado el Colegio de México, dejó una estela de influencia como editor incomparable, al concebir más de quince colecciones patrimoniales mexicanas. Lamentablemente, las colecciones también pueden ser destruidas: hoy hay consenso con que el gobierno de López Obrador acabó con mucha de la riqueza bibliográfica que publica no solo del Fondo de Cultura, sino Conaculta. Con esto quiero decir que no hay nada más satisfactorio para una institución que las colecciones de libros sigan su curso. En 2007, la Pontificia Universidad Javeriana contaba con unas seis colecciones claramente definidas —en su momento pensamos que eran muy pocas—; en el 2013, ya íbamos por cuarenta y tres colecciones —tal vez demasiadas, nos dijimos—; actualmente, hemos estabilizado su número en una cifra razonable de veintiséis. La colección de Clásicos Ignacianos es una de ellas, una de las preferidas por el equipo editorial.

Cuando la Vicerrectoría del Medio Universitario, en el periodo del padre Luis Alfonso Castellanos, S J., creó una serie de textos de voces propias, el desafío fue inmenso. Se delineó el itinerario, se planearon algunos títulos y se escogió la primera entrega. En el 2014, la Autobiografía de san Ignacio de Loyola marcó una senda exitosa: fue un inesperado bestseller. Con un formato pequeño y tapa dura, este primer hito nos llevó a realizar varias reimpresiones y a tener una edición que circula también en nuestras universidades hermanas en Centroamérica. Los Ejercicios espirituales del fundador de la Compañía fue el segundo título, lanzado también en el 2014. En 2016, editamos los Textos escogidos de san Ignacio de Loyola. En el 2017, aparecieron los Textos escogidos de san Francisco Javier con sus Cartas de viaje. En el 2019, se compilaron los textos escogidos del padre Pedro Arrupe, S.J., con el título Testigo del siglo XX. Por último, resalto el reciente número publicado que reúne parte de la obra de un jesuita mayor, el padre Peter-Hans Kolvenbach, S.J.

En Discursos universitarios: textos escogidos de Peter-Hans Kolvenbach, S. J., con una nueva paleta de color y una extensión mayor de páginas, los lectores podrán explorar los escritos de un iluminado y un pionero de la educación que marcó como nadie los destinos de la Compañía.

Ya se están planeando los títulos que vendrán, porque el equipo del padre Libardo Valderrama, S. J., no descansa, para nuestra fortuna. Todos los libros de nuestra colección están disponibles en el Repositorio Institucional de la Biblioteca de la Universidad con acceso libre para la comunidad javeriana. Asimismo, se pueden adquirir en las librerías en versiones digitales e impresas.

Nicolás Morales Thomas
Roberto Vela