Desde finales de 2019, y a raíz de la declaración de la pandemia por covid-19, el tapabocas, un accesorio personal poco habitual hasta entonces, se convirtió en el protagonista en la lucha contra el contagio de la enfermedad. Es así como el uso de protección de las vías respiratorias se volvió obligatorio en casi todos los países del mundo y, por casi dos años, ha sido el acompañante diario a la hora de salir de casa. Si bien se ha demostrado que disminuye el riesgo de contagio, su uso de forma masiva en todo el planeta se ha vuelto un problema a nivel ambiental. Buena parte de las mascarillas usadas en el mundo son quirúrgicas y desechables, por lo que[…]