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"Los hombres están cuestionando las nociones preconcebidas de lo que significa ser masculino y están abriendo espacio para una masculinidad más inclusiva y libre de prejuicios."

Nuevas masculinidades: Soy quien soy

Norberto Fabian Diaz Duarte

Departamento de Comunicación y lenguaje Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales Pontificia Universidad Javeriana, Cali

En los últimos años, hemos sido testigos de un cambio significativo en la forma en que la sociedad percibe y entiende el concepto de masculinidad. A medida que evolucionamos como sociedad, también lo hacen las expectativas y roles de género asociados con ser hombre. En el contexto universitario, esta transformación se vuelve aún más evidente, ya que nos encontramos en un ambiente propicio para la reflexión y la redefinición de las normas tradicionales. 

La reflexión en torno a las masculinidades en el ámbito universitario es un fenómeno alentador. Los hombres están cuestionando las nociones preconcebidas de lo que significa ser masculino y están abriendo espacio para una masculinidad más inclusiva y libre de prejuicios. Estas nuevas masculinidades abarcan una amplia gama de identidades y expresiones de género, desafiando los estereotipos arraigados que han perpetuado la violencia y la discriminación. Durante años hemos reproducido estas actitudes y decisiones sin tener conciencia plena de nuestros actos, pero ahora estamos tomando conciencia de cómo nos percibimos, nos expresamos y aceptamos las diferencias de otros. 

El camino hacia la plena igualdad y el respeto mutuo no está exento de obstáculos. En las universidades, donde los hombres se enfrentan a nuevas experiencias, relaciones y desafíos, es fundamental abordar la prevención de la violencia y la discriminación de género de manera proactiva. Aquí es donde las instituciones educativas y la comunidad universitaria desempeñan un papel crucial. 

Para prevenir las violencias y discriminaciones, es necesario fomentar una cultura de respeto y empatía. Esto significa que se debe educar a la comunidad sobre los conceptos de consentimiento, límites personales y relaciones saludables. Además, es fundamental desafiar los estereotipos de género arraigados en la sociedad y fomentar una mayor representación de las diferentes masculinidades en los espacios universitarios. Esto implica no solo promover la participación y liderazgo de los hombres en la lucha por la igualdad de género, sino también reconocer y valorar las diversas formas de ser hombre. 

Asimismo, es importante abordar las actitudes y creencias arraigadas que perpetúan la violencia y la discriminación, fomentando una cultura de masculinidades no violentas, donde se promueva la resolución pacífica de conflictos y se desapruebe cualquier forma de agresión o control sobre las personas. 

Considero que no debemos hablar de nuevas masculinidades, debido a que estas siempre han estado presentes, solo que se han visto como algo negativo o se relacionan con lo femenino, lo cual ha causado rechazo, pues también se ha considerado lo femenino como algo negativo. Hablar de masculinidades es entender que hay diversas formas de ser hombre, de existir y de relacionarse con los demás, y nadie debería ser juzgado o excluido por ser quien es. 

Es momento de normalizar las diferencias y verlas como un reflejo de la diversidad que nos rodea y de la que todos formamos parte. El Mes del Orgullo nos recuerda la importancia de la inclusión y el respeto hacia la diversidad sexual y de género. Reconocer y valorar las diferentes formas de ser hombre y desafiar los prejuicios y discriminaciones son pasos esenciales en el camino hacia una sociedad más justa y equitativa. 

En esta celebración del Mes del Orgullo, es crucial recordar que la diversidad de masculinidades no solo es bienvenida, sino necesaria. Todos tenemos el derecho de ser auténticos, vivir nuestras vidas con plenitud y ser respetados en nuestra identidad de género. A través del diálogo, la educación y el fomento de una cultura de inclusión, podemos construir un futuro en el que todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género, sean aceptadas y valoradas plenamente.