Agosto 2023 | Edición N°: 1390
Por: Karem Priscila Díaz Díaz | Coordinadora de Comunicación Institucional

Estudiantes, profesores y directivos de la Universidad Javeriana se reunieron para conversar y reflexionar sobre la relación entre profesores y estudiantes, núcleo del Proyecto Educativo Javeriano, bajo una pluralidad de pensamientos y voces.


“En todas las relaciones llega un momento complicado en el que paramos la vida y nos detenemos a reflexionar sobre el cómo vamos en el camino; después de todo, para bailar se necesitan dos. Cosas difíciles pueden pasar en el curso de una relación. Tras darnos por sentado, perdernos en la costumbre o en las apabullantes ocupaciones y afanes de la cotidianidad, podemos dejar de comprender el por qué y el para qué de esa relación. Lo temido no se hace esperar y las frases más clásicas llegan a ser pronunciadas: “no eres tú, soy yo”; “quizá debamos ver a otras personas”; “regalémonos un break” o “démonos un tiempo””.

El anterior párrafo es el inicio de una de las cinco relatorías que resultaron de la XV Jornada de Reflexión Universitaria, espacio exclusivo que tiene la Pontificia Universidad Javeriana para propiciar conversaciones y encuentros entre profesores, estudiantes y directivos, tanto de la sede central en Bogotá como de la seccional en Cali, para pensar juntos la Universidad. En esta ocasión, el tema de reflexión y conversación fue ‘Contribuciones de la relación profesor-estudiante a la Formación Integral’ con el ánimo de propiciar diálogos sobre cómo se está viviendo este encuentro y vínculo entre los dos actores principales del proyecto educativo javeriano y comprender así sus desafíos.

Presentación de la jornada

Continuando con el texto de la relatoría inicial, “tomarse un tiempo no es sinónimo de fracaso sino, por el contrario, de lucha y valor. Quien propone un tiempo, hace muestra de tener el compromiso suficiente como para repensar una relación, trabajando decididamente en su construcción y dejando de asumir que una relación existe simplemente por el hecho de existir. Hoy nuestra relación profesor-estudiante merece detenerse y regalarse ese tiempo para pensar su sentido y reflexionar sobre sus horizontes”.

Ese tiempo se produjo entre el 1° y 17 de agosto pasado. Los escenarios en los que se desarrolló fueron diversos: primero un encuentro en las instalaciones de la Universidad donde se expuso el tema, los objetivos y metodología de la Jornada, luego un espacio de deliberación asincrónico y personal, y, finalmente, la conversación central en el auditorio de Cafam, en Melgar – Tolima.

Presentación Cultural durante la Jornada de Reflexión

Un diálogo plural y enriquecedor

“Lo más significativo de esta Jornada de Reflexión fue que por primera vez hubo una convocatoria de una mayor cantidad de estudiantes y profesores, lo cual permitió que hubiera un diálogo mucho más interdisciplinario y más conectado hacia la realidad que tenemos de la Universidad, en este momento”, comentó Daniel Vargas, estudiante de Estudios Literarios y Filosofía.

Con él concuerda Danna Guzmán, estudiante de Contaduría y Finanzas, al decir que “lo más significativo fue la cantidad de profesores y estudiantes que fuimos y que, si bien las conversaciones se desarrollaron con profesores, directivos y estudiantes no nos veíamos como tal en el rol, sino como personas. Por lo tanto, fue un espacio de pluralidad, de diálogo, de escucha, en donde realmente hablamos sobre el núcleo de lo que es esta Universidad, qué es la relación profesor estudiante, sobre qué es lo que nosotros estamos buscando, en qué punto estamos actualmente en nuestra relación y a lo que queremos llegar como Universidad”.

Las preguntas que guiaron la conversación fueron: ¿Qué formas de ejercicio del poder se viven hoy en la Javeriana en la relación profesor-estudiante? ¿Qué reflexiones nos suscitan estos ejercicios de poder en el marco de la formación integral? ¿Cuáles de las dimensiones de la relación profesor-estudiante en la Javeriana no se están cultivando suficientemente para la realización de nuestro proyecto de formación integral? En entornos altamente digitalizados, ¿Qué potencialidades y riesgos de las tecnologías identificamos en la relación profesor-estudiante? ¿Cómo materializar el cuidado, la reciprocidad comunicativa y la corresponsabilidad en la relación profesor-estudiante en el contexto actual? ¿Cómo las realidades institucionales, socioeconómicas, ambientales, culturales, espirituales, de género, políticas, entre otras, inciden en la relación profesor-estudiante en la Javeriana?

Rondas de conversación

Cada una de estas preguntas fue analizada y respondida en diferentes mesas de conversación que se organizaron con los cerca de 120 participantes de la XV Jornada de Reflexión Universitaria. Al respecto salieron observaciones como: generar espacios de confianza tanto para estudiantes y para profesores en el aula como en el campus; usar los entornos y herramientas digitales para enriquecer la experiencia de la enseñanza y el aprendizaje, dando autonomía al estudiante y reconocimiento al profesor para aclarar dudas. Que el cuidado significa ser conscientes de la existencia del otro, debe ser recíproco lo cual implica una apertura a elementos del dialogo en medio de una relación pedagógica. Y repensar la evaluación hacia un seguimiento de las competencias y del proceso de resultados de aprendizaje, lo cual influiría directamente el tipo de relación que se da entre profesor-estudiante.

Para María Adelaida Farah Quijano, vicerrectora académica y vicerrectora de Extensión y Relaciones Interinstitucionales

“la relación estudiante-profesor es una relación plural y diversa que tiene muchos matices y que hay que cuidarla. Tenemos que entenderla y no dar por sentado que, como estamos en una universidad, la relación se da espontáneamente, sino que tenemos que conversar sobre ella en este cambio de época de contextos y dinámicas que estamos viviendo”.

Finalmente, tomarse este tiempo para pensar, para cuidar esta relación, para soñar siendo de maneras distintas, incluyendo mundos posibles y saberes diversos donde el respeto sea el lenguaje común, será el insumo para el ciclo de la Planeación Universitaria 2024-2028.