El 10 de abril de 2025, la Comunidad de Práctica de Aprendizaje-Servicio de la Pontificia Universidad Javeriana se dio cita en un espacio enriquecedor y lleno de inspiración, donde el conocimiento académico se entrelazó con el compromiso social. Este encuentro fue diseñado para consolidar una metodología que trasciende las aulas y conecta directamente con las necesidades y realidades del entorno.

Durante la jornada, se destacó que, si bien las acciones se desarrollan en colectivo, el verdadero motor de estas iniciativas son los estudiantes. Se abrió un espacio de reflexión sobre el impacto que generan en las comunidades los procesos de aprendizaje-servicio, y se planteó la necesidad urgente de establecer mecanismos para evaluar y medir estos efectos de forma concreta.

Entre las conclusiones más importantes del evento se subrayó la relevancia de documentar cada gestión realizada, definir indicadores claros para la medición de impacto, sistematizar las experiencias en red, articular esfuerzos como universidad, y valorar el plan de vida, la calidad y la seguridad tanto para estudiantes como para las comunidades con las que se trabaja.

El aprendizaje-servicio se consolida así como una herramienta transformadora que fortalece el vínculo entre universidad y sociedad, demostrando que la educación con sentido puede ser un motor de cambio y construcción colectiva.