ISBN : 978-958-781-326-5
ISBN digital: 978-958-781-327-2

Educación y comunicación

Le doy voz a mi ambiente

Liliana Paola Barrios Rodelo, Steffy Bonfante Luna, Angélica María Martínez González, Laura Ramírez García

Estudiantes de Comunicación Social de la Universidad de Cartagena.

lramirezg@unicartagena.edu.co

Resumen

Este texto presenta la experiencia del proyecto de comunicación “Le doy voz a mi ambiente”, enfocado en la educación y el desarrollo. Impulsado con el objetivo de promover la cultura de la conservación del medio ambiente, por medio de la generación de espacios de participación, presenta actividades en las que los estudiantes de la Institución Domingo Benkos-Biohó, del corregimiento de Bocachica, ejercieron su capacidad de intervención en pro del medio ambiente. Para ello, se involucró a un total de 1.311 jóvenes pertenecientes a la institución, quienes participaron en las actividades desarrolladas por medio de herramientas comunicativas que contribuyeron al logro de los objetivos propuestos. Los resultados revelan una solución alternativa, desde los esfuerzos de los mismos habitantes, al visibilizar esta problemática bajo una mirada crítica de manera creativa y participativa. Como consecuencia, los estudiantes desarrollaron sus habilidades de escritura, fotografía y pensamiento crítico, mediante la creación de textos en prosa y tomas de fotografías, en las cuales reconocieron la problemática ambiental presente en el corregimiento.

Palabras clave: comunicación, desarrollo, transformación, contaminación, participación.

Introducción

El presente proyecto está constituido por dos aspectos fundamentales que engloban el motivo de ser de su desarrollo: la problemática ambiental presente en el corregimiento de Bocachica y la razón causal del mismo, identificada como una débil cultura de la conservación del medio ambiente presente en los habitantes de la zona.

Se presentarán una serie de razones que involucran directamente a actores propios y ajenos a la población y que agudizan el deterioro del medio ambiente del corregimiento. En esta primera parte se menciona la situación actual de Bocachica y sus antecedentes; luego, se describe la metodología utilizada para el desarrollo del proyecto, y posterior a eso, se esbozan los resultados de una serie de actividades desarrolladas en el corregimiento, que contaron con la participación activa de los estudiantes de la Institución Educativa Domingo Benkos-Biohó, cuyo objetivo es que desde los isleños se tome la iniciativa de generar una transformación en la cultura de la conservación del medio ambiente.

Adicionalmente, se presentarán los resultados de la participación de actores aliados que se vincularon al proyecto mediante el apoyo a las actividades realizadas por los estudiantes de la Institución desde el proyecto “Guardianes ambientales por la conservación de nuestros recursos” surgido desde las aulas y del presente proyecto, en aras de promover la participación de la comunidad de Bocachica mediante la ejecución de dichas actividades. Entre las entidades de apoyo se concretó la participación y vinculación de la Cruz Roja Seccional Bolívar y de la Fundación Puerto Bahía.

La problemática en Bocachica

Bocachica es un corregimiento de la isla de Tierra Bomba a 15 minutos de distancia desde Cartagena de Indias, en lancha, y se ubica como uno de los sitios turísticos e históricos que rodean el “corralito de piedra”. Con una población de 9000 habitantes aproximadamente -censo 2005-, de extensas raíces afrodescendientes y marcada por una cultura pesquera en virtud del contexto marítimo que la rodea, esta comunidad se define por una historia y recuerdos de un pasado glorioso. Dicha zona insular del país posee diversos sitios de interés: La Batería del Ángel de San Rafael y el Fuerte de San Fernando de Bocachica son los más nombrados.

A pesar de sus históricas fortificaciones, su estratégica ubicación, y el valor cultural del que goza, actualmente el manejo de los desechos en esta zona es precario, y la presencia de un alcantarillado y un acueducto que trate sus aguas es nula, convirtiéndose así en una zona vulnerable y potencialmente susceptible a daños que amenazan el medio ambiente y la salud de sus habitantes. Estas condiciones del estado ambiental de la isla inciden además en la poca presencia de turistas que cada vez se hace más evidente.

Hay quienes afirman que es la falta de inversión para la mejora, promoción y preservación del ecosistema en este corregimiento la causante del fenómeno ambiental presente en Bocachica; sin embargo, la falta de una cultura ambiental por parte de los ciudadanos del sector acaba por empeorar la situación.

La mala utilización de residuos, y por tanto, la falta de puesta en práctica de una conciencia ambiental que permita que los habitantes implementen técnicas como la reducción, reutilización, reciclaje, o valorización de los residuos, agrava el problema de la falta de alcantarillado o acueducto.

Así surge la necesidad de mitigar el impacto negativo sobre el ecosistema de Bocachica desde el reconocimiento del mismo por parte de la comunidad que hace caso omiso mostrando un desinterés hacia las evidentes consecuencias de no hacer parte activa en los procesos de recuperación, promoción, y conservación ambiental.

Es así como el proyecto Le doy voz a mi ambiente desarrollado desde el Programa de Comunicación Social de la Universidad de Cartagena, se hizo pertinente debido a la claridad de unos objetivos que apuntaban a la transformación de la cultura de la conservación del medio ambiente mediante la implementación de estrategias pedagógicas y comunicativas que involucraría no solo a los estudiantes de la institución, sino a la comunidad en general.

Este proyecto buscaba herramientas que pudieran ser utilizadas para la continuidad de ‘Guardianes Ambientales por la Conservación de Nuestros Recursos’, un proyecto educativo iniciado por el docente de la cátedra Biología, Jesús del Cristo Jaraba, de la Institución Domingo Benkos Biohó, que sirvió como base para esta iniciativa.

Así, “Le doy voz a mi ambiente”, en conjunto con el proyecto de educación ambiental de la institución Domingo Benkos-Biohó, buscaba trascender para que la iniciativa llevada a cabo desde la Institución pudiera llegar a toda la población del corregimiento como alternativa para la educación, participación y concientización sobre su capacidad de incidencia en el cambio.

Metodología

En el presente proyecto se aplicaron las estrategias pertinentes tomando como población directa la comunidad estudiantil de la Institución Educativa Domingo Benkos-Biohó -la única institución educativa de la zona- entendiendo las capacidades que tienen para generar un impacto visible en la comunidad de manera que esta última sea vinculada al proceso y se lograra así un cambio en los hábitos ecológicos de la comunidad.

En este sentido, teniendo en cuenta el foco de interés del proyecto, se trabajó desde una perspectiva socioeducativa, se hace pertinente primero, mencionar las características de la investigación en Educación Social o investigación educativa. Esta tiene como eje el regular la ruta del proyecto. Posee unos postulados que encajan perfectamente con el objetivo planteado para su consecución; como es mencionado por Pérez Serrano (2004), este tipo de investigación está orientado a la resolución de unos problemas desde la práctica, es decir, con fines prácticos que precisan la búsqueda de soluciones, como lo suelen requerir los problemas académicos.

Así mismo, la investigación en el ámbito de la Educación Social se rige principalmente en las metodologías de la investigación cualitativa “por considerarlas más adecuadas para la comprensión de la complejidad de la realidad social”(Serrano, 2004).

La investigación social posee una serie de enfoques (Escudero, 2004) desde donde trabajar y que responden a las necesidades de cada proyecto. Partiendo de este principio -y teniendo en cuenta que la intención del presente trabajo es la resolución de problemas desde la práctica y la acción-, es preciso contar con una metodología que permitiera indagar, analizar y resolver problemas con las comunidades.

Por lo anterior, para la consecución de “Le doy voz a mi ambiente”, se tomó como metodología la técnica de Investigación-Acción Participativa (IAP) en tanto esta “apunta a la producción de un conocimiento propositivo y transformador, mediante un proceso de debate, reflexión y construcción colectiva de saberes entre los diferentes actores de un territorio con el fin de lograr la transformación social.” (Como se cita en (Gutiérrez y Sarmiento, 2013).

La promoción de una participación por parte de la comunidad involucrada, incidió en la concientización del papel activo y dinámico que tienen dentro de su contexto.

En éste caso, fue necesaria una interacción entre los sujetos -participantes e investigadores- para generar un proceso de corresponsabilidad que contribuyera a obtener los resultados deseados.

De esta manera, no se pretende solamente indagar un objeto de estudio, y comprender sus hábitos, actitudes y comportamientos, sino apuntar “a la transformación de la realidad en un esfuerzo para mejorarla y asegurar de esta manera que hombres y mujeres sean reconocidos como sujetos de su propia historia” (Kirchner, s.f.). Para ello, se pretende actuar frente a las realidades sociales, considerando para su transformación la voz de los actores.

Actividades realizadas

Para la consecución de los objetivos, se plantearon diversas estrategias comunicativas, adecuadas a la técnica de Investigación Acción Participativa:

Para el logro del primer objetivo, que consistió en generar espacios de participación que involucraran a estudiantes de la Institución Domingo Benkos-Biohó en actividades comunicativas que incidieran en el reconocimiento de la problemática ambiental presente en Bocachica, se realizaron diversas actividades que desarrollaron el pensamiento crítico de 169 estudiantes de la Institución frente a la situación ambiental del corregimiento.

Inicialmente se llevó a cabo un concurso de escritura de textos en prosa dirigido a los grados 10° y 11°, logrando generar un alto compromiso en los estudiantes reflejado en la participación activa de 45 de ellos y el interés por el proceso de selección.

Con frases como «la única herramienta que nos puede servir para minimizar el impacto que genera la no conservación del ecosistema, se llama “conciencia”» ó «Tenemos que brindarle amor, dedicación y todo nuestro tiempo», los estudiantes demostraron tener un pensamiento crítico con respecto a la problemática.

Posteriormente los estudiantes de 7° recibieron un taller de fotografía para reforzar sus habilidades comunicativas, con el cual se logró desarrollar de manera creativa la capacidad de reconocimiento de las áreas afectadas por la contaminación en aproximadamente 120 estudiantes de la institución educativa.

Mediante una galería de fotos que fue expuesta en las principales calles de Bocachica, se pudo evidenciar el desarrollo de las habilidades comunicativas de los estudiantes, ya que la comunidad, estudiantes e invitados, pudieron observar diferentes fotografías que mostraban las zonas más conservadas en contraste con las zonas afectadas por la contaminación del corregimiento, resultado de tres salidas con los estudiantes de séptimo para el registro fotográfico.

La galería de fotos obtuvo los resultados deseados al contar con el interés y la participación de gran parte de la comunidad, debido a que los pendones de las fotografías fueron ubicados en las fachadas de sus casas, generando así una responsabilidad frente al buen desarrollo de la actividad.

Tras el impacto visual generado en la comunidad, se logró hacer el reconocimiento de los lugares plasmados en las piezas visuales, que representaban la problemática, y posteriormente se plantearon posibles soluciones a ella.

Para el segundo objetivo del proyecto, que consistió en promover la participación de la comunidad de Bocachica y de las organizaciones aliadas mediante el apoyo a las actividades realizadas por los estudiantes de la Institución desde el proyecto de ‘Guardianes ambientales por la conservación de nuestros recursos’ y del presente proyecto, el equipo de trabajo de ‘Le doy voz a mi ambiente’ realizó una serie de visitas con miras a la consecución de aliados que se vincularon al proyecto.

Entre las entidades de apoyo se concretó la participación y vinculación de la Cruz Roja Seccional Bolívar y de la Fundación Puerto Bahía.

Con la primera entidad se realizaron dos actividades con los estudiantes de la Institución, que se repartieron en el objetivo N°1 y N°2 del proyecto: La participación del voluntariado de la Cruz Roja Seccional Bolívar a través de un plan de actividades comunitarias del programa titulado ‘Aire Libre’ que fue liderado y desarrollado expresamente por el personal de esta organización.

Con la segunda entidad se logró el apoyo mediante el montaje de una obra de teatro en el que participaron 9 estudiantes de la Institución, elegidos por la docente del área de Artística, Danilsa Silva Meñaca; la obra teatral basada en la fábula “Échale la culpa al cerdo” de Silvia Warner, referente a una temática ambiental, fue dirigida por un representante del programa de Fortalecimiento cultural de la Fundación Puerto Bahía.

Con la obra de teatro se logró la participación activa de los estudiantes actores quienes tomaron el papel de gestores para la concientización sobre la problemática ambiental del corregimiento a la población que presenció la presentación: 703 estudiantes de la Institución Domingo Benkos-Biohó.

La vinculación de aliados permitió el patrocinio de elementos de una de las actividades. La agencia de diseño y publicidad ‘La Nueva Imagen de Cartagena’, donaron al proyecto dos de los pendones utilizados para la galería fotográfica que se realizó en las calles de Bocachica. Así mismo, la agencia de diseño y publicidad Trion, patrocinaron parte del total de 7 pendones con el mismo fin.

La vicerrectoría de Bienestar Universitario de la Universidad de Cartagena, se vinculó al proyecto mediante la donación de los 12 afiches publicitarios utilizados para la promoción de la actividad de la Galería Fotográfica y el Festival Ambiental, actividades que se llevaron a cabo en el corregimiento.

Para el tercer objetivo del proyecto que consistió en promover la cultura del reciclaje en los estudiantes de la Institución mediante la dotación de puntos ecológicos y contenedores en lugares estratégicos dentro del colegio y en el corregimiento, se realizó una capacitación sobre manejo de residuos, por parte de estudiantes del programa Técnico en factores de riesgos ambientales del Instituto de Educación de la Cruz Roja Seccional Bolívar, a 75 estudiantes de los grados 9°y 7° de la Institución.

En este taller, se puso en práctica lo aprendido mediante actividades lúdicas desarrolladas en la jornada como lo fue el reconocimiento y clasificación de diferentes residuos sólidos para posteriormente, identificar la manera correcta de reciclarlos o desecharlos en los puntos ecológicos destinadas para tal fin.

Esta actividad se realizó con el objetivo de que los estudiantes supieran la forma correcta de utilizar los puntos ecológicos, consignado como uno de los logros del proyecto. Para finalizar, los estudiantes se comprometieron con el cuidado del medio ambiente del corregimiento al dejar su huella en pintura en un mural ubicado dentro del colegio, como una metáfora que hacía alusión a su intervención en el cuidado y promoción de su entorno.

Como cierre del proyecto, el día viernes 10 de junio de 2016, se llevó a cabo el “1er Festival ambiental de Bocachica”, en el que el voluntariado de la Cruz Roja, Seccional Bolívar, participó mediante la puesta de tres stands en puntos estratégicos del corregimiento, en los cuales se llevaron a cabo varias actividades lúdicas que contaron con la participación activa de 703 estudiantes de la Institución. El cambio climático, el calentamiento global, entre otros, fueron los temas tratados en dichos stands.

Cabe resaltar que algunos egresados, padres de familias e integrantes del grupo de ancianos que hacen parte de la Casa de Vida del corregimiento también hicieron parte de las actividades realizadas.

Reflexión desde la experiencia

“Le doy voz a mi ambiente” promovió en los estudiantes de la Institución Educativa Domingo Benko Biohó, un pensamiento crítico con respecto al cuidado del medio ambiente. Además, propició dentro del grupo de trabajo del proyecto, nuevos conocimientos sobre una zona insular desconocida para algunos, indiferente a sus hábitos, costumbres, y su propia historia. El proyecto siguió un procedimiento que permitió usar la comunicación como mecanismo para narrar lo desconocido y poder brindar las herramientas necesarias a todos los actores de la comunidad en pro de alzar su voz, y ser parte activa en los procesos que afecten sus condiciones de vida.

El compromiso de la Institución Educativa, se vio reflejado en la efectiva realización del proyecto pues fueron vitales en la asignación de responsabilidades, identificación de problemas, y organización de los estudiantes para cada actividad acordada desde la asignatura correspondiente; cada actividad contribuyó al logro de los objetivos propuestos. Por otra parte, la Institución sigue implementado el proyecto ambiental propio. Sin embargo, lo enriquecen con actividades aportadas por el proyecto de “Le doy voz a mi ambiente”.

En la ejecución del proyecto, se presentaron dificultades en el ámbito económico como la consecución de patrocinadores y la coordinación del desplazamiento de invitados especiales a la isla en el marco del festival ambiental. Para la recolección de recursos, se hizo necesario realizar varias actividades dentro de la Universidad y acudir a la autofinanciación; por otro lado, el grupo de trabajo del proyecto, logró el patrocinio de recursos para los productos de las actividades desarrolladas por los estudiantes y la vinculación de aliados que hicieron parte fundamental para la consecución de los objetivos como lo fue la participación activa de la Cruz Roja Colombiana, Sección Bolívar, quienes se encargaron de enseñarle a los estudiantes de manera lúdica y dinámica sobre el reciclaje, la disposición de residuos sólidos, y la importancia del cuidado del medio ambiente.

Es menester resaltar que se generó cambios en el pensamiento de muchos jóvenes de la Institución con respecto al cuidado del medio ambiente, basta con hablar con ellos en la actualidad para identificar comportamientos positivos y modos de percibir la realidad de su contexto; estos impactan directa e indirectamente a sus familiares, amigos y conocidos. Por otro lado, se reconoce que la comunicación y sus herramientas jugó un papel muy importante en todo el proyecto, pues fue la base de todos los objetivos y permitió generar espacios de participación en los que los estudiantes pudieran expresar sus opiniones al respecto y al mismo tiempo ser conscientes de la situación de su isla.

Referencias

Escudero, J. (2004). Análisis de la realidad local. Técnicas y métodos de investigación desde la animación sociocultural. Madrid: Narcea.

Gutiérrez, M., y Sarmiento, C. (2013). La Investigación Acción Participativa –IAP- Metodología alternativa para la construcción de políticas públicas en salud. Recuperado el 27 de Abril de 2016, de Base de datos Universidad Nacional de Colombia: https://www.bdigital.unal.edu.co/44350/1/1018407114.2013.pdf

Kirchner, A. (s. f.). La investigación acción part icipativa (IAP). Obtenido de Campus Virtual UNAD: https://datateca.unad.edu.co/contenidos/401432/Lecturas/Investigacion_Accion_Participativa._Alicia_Kirchner_unidad_I_.pdf