La nueva ley que prohíbe el castigo físico y humillante a niños, niñas y adolescentes despierta preguntas en los padres. ¿Se puede educar de otra forma?
Categoría: castigo físico
“No me gusta, pero está bien si me porto mal”. Esta frase interpreta el sentimiento general de los niños involucrados en esta investigación, e ilustra en la justa medida la representación del castigo físico que soportan algunos de ellos en los estratos 1 y 2 en Bogotá. Los mismos niños son quienes proponen que cuando se porten mal, les hablen y les expliquen en vez de pegarles o humillarlos, aunque muchos justifican el castigo como algo necesario en su propio proceso pedagógico y formativo.