Tradicionalmente, los profesionales de áreas como biología, química, física y otras ciencias básicas han optado por desempeñarse en campos académicos, lejos del mundo de la administración pública. Sin embargo, en los últimos años se ha hecho cada vez más visible el interés de las instituciones gubernamentales por diversificar su plantilla de empleados e incluir expertos en diferentes áreas para mejorar su gestión y desempeño.
La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) ha mostrado ser un ejemplo de esta tendencia. Así lo evidenció con su última convocatoria pública dirigida a más de cuatro mil profesionales, técnicos y asistenciales, dentro de los que se incluyen perfiles de ciencias básicas; roles poco visibles, pero esenciales para el funcionamiento adecuado de estas entidades y el desarrollo de políticas eficaces y eficientes. Así lo reconoció el actual director, Luis Carlos Reyes, en diálogo con Pesquisa Javeriana.
“Una de las razones principales por la cual involucramos a las personas de ciencias básicas es porque dentro de la formación de estos profesionales destaca su rigurosidad y criterio para abordar problemas complejos, y eso es lo que más necesitamos en la DIAN. Tenemos que diseñar una serie de estrategias para luchar contra la evasión, crear sistemas de analítica para evitar riesgos de contrabando, y aquí la formación de estos profesionales provee un aporte muy valioso”, reconoce Reyes.
El papel de los profesionales de ciencias básicas en las instituciones públicas
En la DIAN, por ejemplo, los profesionales, además de los enfoques ya mencionados por Reyes, se pueden involucrar en la implementación y seguimiento de sistemas informáticos y tecnológicos que permitan la recolección y el procesamiento de información relevante para la entidad.
Ellos tienen la capacidad de aportar sus conocimientos y herramientas técnicas para resolver problemas complejos en diversas áreas, como la salud, la educación, el medio ambiente y la energía, entre otras. En particular, algunos perfiles de ciencias básicas son de gran relevancia en el ámbito aduanero. Según explica el director de la DIAN, “es crucial que cada producto que entre o salga de un país esté debidamente catalogado y que su composición química corresponda con la indicada por el importador; con esto podrán determinarse los aranceles a pagar y es posible validar su legalidad. En este punto, los profesionales en ciencias básicas pueden desempeñar un papel clave al asegurar que se cumplan estas regulaciones”.

Para Jorge Jácome, director del programa de Biología de la Pontificia Universidad Javeriana, esta convocatoria es una acción que debió haberse dado desde hace mucho tiempo y es realmente valiosa para los profesionales de su área. Afirma que esta iniciativa ayudará a controlar el ingreso de especies foráneas con potencial invasivo y la salida de especies nativas provenientes de prácticas no permitidos. Para el desarrollo de estas labores se requiere la aplicación de conceptos técnicos y un conocimiento claro de los profesionales para otorgar o negar permisos de ingreso, por ejemplo.
Además, “la presencia de biólogos con formación en biotecnología capaces de emitir conceptos sobre solicitudes relacionadas con el ingreso y manejo aduanero de insumos importados asociados a procesos biotecnológicos favorecerá la investigación, ya que el manejo inadecuado de estos materiales puede tener graves consecuencias económicas y para el desarrollo”, señala el experto.
Tal como reconoce Jácome, “el conocimiento acerca de si alguna especie horticultural, animal, etc., requiere un tratamiento especial, son características técnicas que solo un biólogo especialista en biodiversidad y en conservación debería considerar”.
Por su parte, el profesor asociado del Departamento de Física de la Universidad Javeriana, Luis Camilo Jiménez Borrego, explica que los físicos en la DIAN pueden tener buen desempeño en los laboratorios aduaneros, en donde hacen caracterización y análisis de materiales y dispositivos; “verifican y determinan la estructura y funcionalidad de un elemento, que los componentes que se describen y explican en el manual de especificaciones correspondan a su contenido real; esto en la parte tecnológica, de salud, alimentaria y otros”.
Los profesores javerianos coinciden que el fin último de su labor en donde quiera que sea está orientado a cuidar la vida, por lo que su labor en la DIAN debe ser de una ética impecable. “Reconocer cuando no conocen o saben algo para buscar asistencia y sobre todo comunicar muy bien”, habilidades que, según Jácome y Jiménez, se debe fortalecer para estar a la vanguardia y tener un diálogo más directo con la ciudadanía no científica.
Como estos, son otros los perfiles que la convocatoria considera y que representa una gran oportunidad para los profesionales de las ciencias básicas (química, física, matemática, entre otros).
Otros apuntes de la convocatoria
Ingresar a una entidad pública puede ser un proceso retador debido a la limitada apertura de vacantes en determinados momentos, la presencia de personas provisionales que ya ocupan cargos en la institución y buscan ser promovidas y vinculadas directamente por la entidad, sumado a la cantidad de filtros y requisitos que se deben cumplir durante el proceso de selección puede hacerlo aún más complejo.
A pesar de esto, indica el doctor Reyes, “la convocatoria fue un gran éxito en la medida en que para los 4500 cargos se inscribieron 272 425 personas, eso muestra un gran interés del público por trabajar en la DIAN”, y explica que uno de los deseos que se quiere con esta iniciativa es disminuir la evasión tributaria del país que gira alrededor del 7 % del Producto Interno Bruto, frente al 1 % de países como Reino Unido o el 2 % de Estados Unidos.
Aunque es cierto que obtener un empleo en una entidad pública requiere dedicación y esfuerzo, no es imposible lograrlo, así lo hace saber Reyes, quien asegura que a nivel interno están haciendo un gran esfuerzo por elegir a los mejores profesionales y, para quienes se quedaron por fuera en esta oportunidad, el director dice que el actual gobierno promete abrir más de estos espacios. “Anualmente, la DIAN dará lugar a un concurso para recibir a nuevos profesionales. La magnitud no será la misma, pero será una gran oportunidad para quienes quieran hacer parte de la entidad”, finaliza.