Esta nota titulada Investigación invalida la terapia con imanes fue publicada originalmente el 9 de agosto de 2009*
El uso de imanes con propósitos terapéuticos no es nuevo. Muchos coinciden en rastrear sus orígenes hacia la época de Paracelsus (en el siglo XV), el médico y alquimista que dedujo que si los imanes tienen el poder de atraer el hierro, quizás podrían atraer las enfermedades y por consiguiente retirarlas del cuerpo. Hoy, los vendedores de accesorios magnéticos utilizan argumentos que van desde una mejoría en la circulación de la sangre, pasando por una modificación de los impulsos nerviosos, hasta un incremento en el contenido de oxígeno o en la alcalinidad de los fluidos del cuerpo. No hay estudios científicos que respalden estos efectos en el organismo y sin embargo se siguen vendiendo elementos magnéticos para aliviar diversas dolencias.
Las ganancias entre los productores de brazaletes magnéticos, vendas, plantillas, colchones, etc. que los promocionan como solución casi milagrosa ante el dolor, son crecientes y multimillonarias. Se estima que las ventas anuales en Estados Unidos son de 300 millones de dólares y que en el mundo alcanzan más de 1.000 millones. Si bien la terapia con imanes es relativamente inofensiva, ya que no tiene medicamentos ni efectos colaterales, sí puede evitar que la gente busque una solución efectiva ante sus padecimientos.
No se han realizado muchos estudios sobre terapias magnéticas y los que hay presentan resultados distintos. Además se les objeta el utilizar grupos muy pequeños de pacientes, o sólo de aquellos sometidos a tratamiento, cuando se sabe que el poder de sugestión por sí solo es capaz de aliviar las dolencias.
Con el objetivo de superar estas deficiencias y para evaluar la eficacia de la terapia magnética, un grupo de investigadores de la Unidad de Epidemiología Clínica de la Pontificia Universidad Javeriana, liderado por la doctora Soledad Cepeda Ph.D., seleccionó pacientes con dolor postoperatorio agudo y los sometió a terapia magnética observando cuidadosamente su efecto sobre el dolor; se contó con un grupo de control para evaluar los resultados.
¿Cómo se hizo el estudio?
El diseño fue un ensayo clínico aleatorizado doble ciego. Doble ciego ya que ni los investigadores, ni los investigados supieron a cuáles de los pacientes se les estaban colocando imanes. Aleatorizado ya que los individuos seleccionados para el estudio fueron elegidos al azar.
Se escogieron 161 pacientes mayores de 12 años sometidos a procedimientos quirúrgicos bajo anestesia general, que refirieran al menos dolor moderado tras despertar de la anestesia. Las características demográficas, la duración y el tipo de cirugía, la dosis intraoperatoria de analgésicos y la intensidad de dolor fueron similares en ambos grupos.
Ochenta y uno fueron asignados a los imanes activos y 84 a los imanes placebo. Los imanes (activos y placebos) se colocaron en cada extremo de la incisión y alrededor de ésta de acuerdo con las instrucciones del fabricante. Los pacientes calificaron la intensidad de dolor con una escala de cero a diez cada diez minutos, y recibieron dosis incrementales de morfina hasta que la intensidad del dolor fuera menor o igual que cuatro en una escala sobre diez.
La intensidad del dolor fue similar en ambos grupos. El grupo con imanes activos tuvo un promedio 0.04 unidades más en la intensidad de dolor que el grupo placebo. Los requerimientos de analgésicos también fueron similares en ambos grupos. El grupo con imanes activos requirió 1.15 mg más de morfina que el grupo de control. Con lo anterior se demostró que la terapia magnética no disminuye la intensidad del dolor postoperatorio ni los requerimientos de opioide, por lo que no debe usarse para el tratamiento de dolor agudo postoperatorio u otros síndromes dolorosos, en los cuales la fuente del dolor sea la lesión del tejido.
Cuenta la investigadora
Soledad Cepeda es médica anestesióloga, especialista en manejo del dolor de la Pontificia Universidad Javeriana, y doctora en epidemiología de la Universidad de Pensilvania en Filadelfia. Actualmente reside en Estados Unidos donde se encuentra vinculada con la industria farmacéutica. Pesquisa dialogó con ella para profundizar en algunos aspectos de su investigación.
¿Qué los motivó a evaluar un tipo de terapia con muy pocas simpatías entre la comunidad científica?
Nos pareció interesante evaluar la terapia magnética con el mismo rigor con que se evalúa cualquier tratamiento farmacológico, a pesar de que nos criticaron argumentando que no valía la pena que desperdiciáramos recursos en estudiar algo que de antemano se sabe que no sirve. Sin embargo, mucha gente usa los magnetos y gasta millones en ellos, eso justifica que se les preste atención.
Uno de los objetivos del estudio fue propiciar que la comunidad científica desaconseje el uso de magnetos para el tratamiento del dolor. ¿En qué medida se ha logrado esto?
No creo que un estudio científico llegue a tener efecto sobre los pacientes ya que tiene muy poca fuerza frente a los esfuerzos publicitarios de los fabricantes de magnetos. El estudio fue publicado en Anesthesia & Analgesia, una de las revistas del dolor más importantes del mundo, donde le dedicaron tres editoriales, pero los pacientes no leen las revistas médicas.
Lo que hay que hacer es regular el mercado, que se pongan avisos en los productos así sea en letras pequeñas: “hay estudios que muestran que estos magnetos no sirven…”; el problema es que no están regulados como no lo están muchas de las vitaminas, pero esa es otra cuestión.
El efecto de la terapia magnética fue evaluado por su capacidad para aliviar el dolor, sin embargo, la única forma de medirlo es preguntándole a los pacientes qué tanto dolor sienten, ¿esto no introduce una dosis de subjetividad en el estudio?
Sí, en parte, idealmente lo que se quiere es una medida muy objetiva de tal manera que si uno repite el estudio obtenga exactamente los mismos resultados. En dolor no tenemos eso por lo que se necesita un mayor número de casos para demostrar lo que se quiere. Y para que sean representativos lo que se hace es establecer un procedimiento aleatorizado de selección. Así es como se asegura que los grupos sean similares.
La subjetividad influye pero en este caso no invalida los resultados, ya que ésta se controla. Se aumenta el número de casos y se tiene un grupo experimental (el que se somete a la terapia) y otro de control (el que no recibe ningún tipo de terapia, pero donde los individuos creen recibirla; incluso las personas que toman las mediciones no saben a qué grupo pertenece cada quien).
¿Después de su investigación, realizada en 2005, qué avances ha habido en el campo del tratamiento del dolor?
Se han lanzado nuevas drogas al mercado que podrían tener mayor efectividad y menos efectos adversos; ahora hay más opciones que antes. También se ha desarrollado una cultura más sensible a los efectos del dolor, sobre la calidad de vida de los enfermos y sus familias, y que considera el tema como una prioridad. Por otra parte, conocemos más sobre cómo se transmite el dolor y por qué éste se vuelve crónico. Hay un mayor entendimiento de lo que pasa y esto se revierte en drogas y aparatos de mayor calidad y en discernir la mejor manera de intervenir en las distintas fases de su evolución.
El rigor con el que se llevó a cabo el estudio permite concluir que la terapia magnética no sirve para el tratamiento de dolor agudo postoperatorio u otros síndromes dolorosos, en los cuales la fuente del dolor sea la lesión del tejido. ¿Se pueden generalizar estos resultados a otros tipos de dolor?
No, nosotros evaluamos un tipo específico de dolor, donde hay una herida física. Los mecanismos para otro tipo de dolor, por ejemplo el neuropático, pueden ser diferentes. Yo extrapolaría los resultados a otros tipos de dolor agudo. Creo que los magnetos no son eficaces en esos casos, pero no puedo asegurarlo ciento por ciento hasta que no se estudie científicamente cada caso. Es más, si el abogado de un productor de magnetos nos llevara a una corte yo no podría argumentar sino que la terapia magnética no es efectiva en el tipo de dolor estudiado.
A pesar de los avances en drogas y terapias para aliviar el dolor, muchos siguen optando por artefactos magnéticos con escaso apoyo científico. Como sugiere la doctora Cepeda, mientras no se compruebe en cada caso de dolor que los imanes no son efectivos habrá que conceder el beneficio de la duda. Y reconocer, como también lo hizo Paracelsus, que el poder de la sugestión, la confianza o la fe son ingredientes importantísimos de cualquier proceso curativo.
26 comentarios
Es realmente interesante, ojalá lo hubiera visto antes. Fuerte saludo.
El objetivo de la investigacion esta mal diseñada ,pues ,pongo un ejemplo : si me corto la mano trabajando con cuchillo ,tonto seria recurrir a un imán para que me quite el dolor ,lo lógico es desinfectar y si se necesita ,cerrar la herida coser .pero usar un imán para quitar el dolor y afirmar luego que el uso de imanes no sirve como analgésico .es el más grande error ,y todavía usando métodos científicos es a todas luces MALEVOLO ,lleno de despropósito y mala intención pero también podríamos pensar y calificar como . error por inocencia. Para que hacer tanto gasto y estudio .pues solo faltaba imaginarse el ejemplo de corte de piei.
yo estoy convencido que los imanes cambian la energía regula la frecuencia de las células y ese cambio se llama salud.
He sido tratada con biomagnetismo método Goiz y me he olvidado del dolor. Aceptemos que son terapias complementarias. Si se empecinan en denostar la técnica, es porque la alopátia con su gran red de negocios, va quedando sin adeptos y va cayendo un negociado de cifras incalculables. Acepten que la alopátia no tiene la solución para todo. Hay miles de terapias complementarias que colaboran con el mejoramiento de la salud. Ya que estudian y defienden tanto la alopátia, en lugar de buscar derribar estás terapias, que investiguen a fondo las contraindicaciones y choques que existen entre algunos medicamentos que envenenan el organismo. Mejoran una dolencia y generan otra en forma simultánea. Abran la mente y acepten que la medicina alopáta carece de infalibilidad.
Me encanta leer comentarios de personas que piensan con la cabeza,no con el bolsillo,la industria farmacéutica por un lado alivia si……pero el efecto a largo plazo es asqueroso,gracias a tratamientos prolongados me generaron esteatosis alta,y quién se hace cargo???? NADIE….años con inyecciones de diclo- dexa y diazepam y mi pobre hígado no da más,además de dejarme todo el cuerpo con un pH súper ácido y las consecuencias en cada órgano,la ginecologia en Argentina (Rosario) es UN DESASTRE,los médicos inhumanos,sin empatía y 100% comerciantes,así que opte por hacerme solo los chequeos anuales y PUNTO?,PERO EL BIENESTAR ME LO DA Y SEGUIRA DANDO LA TERAPIA ALTERNATIVA,ya sea con imanes, alimentación saludable,la natación,caminatas, mindfulness,acupuntura o cualquier terapia menos invasiva que la medicina tradicional,ya lo dijo un viejo y querido ciudadano de Córdoba “yo me curo con las hierbas que busco en las montañas” JA!!!!!!que patadita en el trasero para los médicos y farmacéuticos comerciantes de hoy en día no?????BUSQUEN TERAPIAS ALTERNATIVAS PORQUE LA MEDICINA TRADICIONAL ENFERMA MAS MUCHAS VECES……(esto va dirigido a la dra Della Pasqua Natalia( ginecóloga que cuando se le queman las papas te manda a sacarte el útero,sin más ni menos,tratando de viejas,gordas y con desórdenes psicológicos a sus pacientes que PADECEN ENDOMETRIOSIS) ? tipa cínica si las hay…..
Desde que conocí la terapia biomagnetica no e vuelto a pisar un hospital por causas naturales, resulta que hace 7 años atrás me querían retirarme un órgano (El vaso) según la medicina la causa de los problemas que tenía era la disfunción del vaso.
Un día me hablaron de esta terapia y me contacté con el terapeuta y el me dijo que se podía recuperar este órgano simplemente con la colocación de 3 imanes ? colocados en puntos estratégicos del cuerpo, el me los puso una sola vez y me explico como yo mismo podía ponérmelos y seguir con el tratamiento en casa lo hice por un mes todos los días!
Y hoy en día tengo mi órgano sano Los médicos se sorprendieron y no comprendieron como un órgano inservible para ellos se recuperó al ? x ? y que conste yo llegue hacerme los análisis para la Operación.. pero gracia a Dios no fue necesario así que yo doy Fe que los imanes si curan!! Y no ocasionan daños secundarios con el tiempo Como el 99.9% de la medicina moderna
La mayoría de los que comentan quizá son personas que han tenido alguna experiencia con la magnetoterapía, la verdad yo he investigado a fondo y no he descubierto una verdadera base bioquímica – física – biológica. Pero de lo que si estoy convencido es de el efecto placebo y su efecto en la mente de las personas. realmente conocí a muchas personas que acudieron a estas terapias con cancer u otras enfermedades (ninguno curado) solo mejoraban por un tiempo. pero muchos de ellos decidieron no abandonar sus tratamientos médicos.
Los imanes son inocuos. en especial los que se usan en tomografías que son mucho mas poderosos que los que se usan en una sesión de terapia magnética.
Lo que percibo también es que es súper fácil de aprender y que muchos incurren en este medio cada vez más común lo cual aporta verdaderas ganancias sin invertir demasiado. si bien la terapia es barata, esta consta de varias sesiones para lograr resultados.
La verdad yo me traté mi rodilla mediante imanes y nunca obtuve ninguna mejoría, hasta que acudí con un doctor especialista en ello. Sin embargo la mente es muy poderosa y la sugestión lo es más. simplemente díganme que sensación tienen cuando acuden a un medico y les da una receta, es una sensación de bienestar y aun no han tomado nada de el medicamento.
En lo particular esta practica está a una linea muy delgada de el esoterismo y de fuerzas desconocidas las cuales no tiene una explicación lógica o científica demostrable. tal como astrónomos, científicos e investigadores pudieron demostrar en cuanto a sus campos y muchos de ellos son realidades innegables.
Pero déjenme decirles que en la actualidad hay personas que siguen pensando que la tierra es plana o que el magnetismo afecta directamente las emociones de un ser humano y no las consecuencias de sus actos. después de todo cada quien tiene la libertad de creer lo que quiera.
En lo particular este artículo me parece sumamente interesante y puede que a muchos nos sea de demasiado beneficio al escoger los tratamientos médicos o terapias que uno decide utilizar y también investigar antes de usarlos.
Supongo que mi comentario será criticado . así que pueden hacerlo pues tienen esa libertad.
comentarios en 3..2..1..
Yo tengo familia que cura con imanes, yo no creo en esto pero en caso de estar enfermo y los doctores ya no pudieran hacer nada, usaría los imanes pero no como primera opcion.
post sin tecnicismos y fácil lectura, así da gusto leet, gracias admin.
post sin tecnicismos y fácil lectura, así da gusto leet, gracias admin.
fantástico post, comprensible de leer, que gustazo leer así, gracias administrador.
buen post admin, así da gusto leer, gracias admin.
Para reflexionar:
1) Un solo estudio? que no deberían existir muchos para darle más validez?
2) En donde está el estudio? ¿Quién lo elaboró? publíquenlo por favorrrr
3) ¿Un estudio de la Facultad de MEDICINA lo desvirtúa? Claro, son los enemigos de las Terapias Alternativas.
4) ¿Quién financía dicha Universidad? Acaso será la misma Industria Farmacéutica?
5) ¿No hay estudios que avalen la efectividad de la terapia? Si los hay pero los desconocen, y otra cosa. Solo salgan a preguntar a las personas que utilizan dichas terapias y OHH Sorpresa!
MAS DEL 90% les van a dar muy BUENAS REFERENCIAS..
Y pudiera seguir, pero no tiene caso.
LOS IMANES NO SE USAN COMO ANALGESICO Y NO CURAN TRAUMAS, PERO SI CURAN DOLORES CAUSADOS POR LAS ENFERMEDADES Y LAS ENFERMEDADES COMO TAL SON CURADAS DES PUES DE VARIAS TERAPIAS,LOS PACIENTES SIENTEN MEJORIA DESPUES DE LA PRIMERA TERAPIA HASTA SU COMPLETA CURACION DE CUALQUIER TIPO DE ENFERMEDADES.PERO UDS NUNCA VAN A ACEPTARLO QUE UNA ENFERMEDAD QUE UDS SUPONEN INCURABLES SEAN CURADAS CON UN METODO TAN SENCILLO Y BARATO
Buenas tardes yo deseo aprender alguna terapia dónde yo contribuya con la gente, dónde muchas personas están sufriendo tanto por diferente causas y la más grave es la depresión. Te pregunto son efectivo
Por favor me puedes ayudar
Los imanes “no funcionan, no funcionan”, claro, porque si funcionan, es para ir en contra de los grandes intereses de los millonarios dueños de los laboratorios, desgraciadamente por amor al dinero dejan sufrir a la humanidad, no les conviene que algo sencillo funcione, porque si funciona no les reporte ganancias a ellos, por eso en lugar de buscar alternativas económicas, por ejemplo en las plantas, ellos buscan esconder todo descubrimiento y hasta ridiculizan a quienes usan hierbas para curar, y por su puesto ahora el aumento del sencillo uso de los imanes para medicar y con fines terapéuticos, jamás lo van a ver con buenos ojos. Esa señora investigadora que vaya a investigar cuánto daño hace a la gente humilde que no puede pagar los millonarios costos de medicamentos que resulta imposible recuperar la salud usando sus productos farmacéuticos y desgraciadamente mueren al no poder pagar sus ilimitadas ambiciones de dinero.
Cordial saludo
Este artículo me parece fuera de base ya que la terapia del biomagnetismo no es para el dolor, jamás un Magneto puesto quitaría el dolor, informe se acerca de esta alternativa antes de afirmar algo.
En la mayoría de países desarrollados como Suiza usan esta y cantidades de terapias alternativas.
No cometan tantos errores y no los publiquen.
Cualquier persona que sepa algo de medicina negaría que algunas plantas tienen efectos curativos cuando se ingieren, pero los imanes?? como se supone que los imanes ayudan al cuerpo.
Es extraño que la doctora no haya invitado al doctor GOIZ o a un buen terapeuta de biomagnetismo a realizar con ella su investigación y de manera tan folclórica diga que se guió por las instrucciones del vendedor de imanes.Pero no es extraño que justo una persona que trabaja con la INDUSTRIA FARMACÉUTICA dé estos conceptos. Tengo 62 años, hasta el momento no consumo medicamentos . Eso no significa que en algún momento los necesite, pero trato de retardar su uso ayudada de terapias alternativas . En un curso que realicé sobre medicina energética , la profesora dijo algo muy cierto : Cada persona es única, cada uno de nosotros tiene su propio mapa, así pues, invito a que hagamos uso del gran abanico de posibilidades que nos brindan las terapias alternativas. Seguro…seguro , si no funciona una cosa, funciona otra; pero no te quedes esperando que te manda el médico porque tendrás siempre tu cartera llena pastillas . En la mía nunca faltan dos imanes y una cuchara.
Claro que no son para dolor son para virus,parásitos y bacterias úsalos.. busque a un buen biomagnetista y se ahorran mucho dinero. Claro que si sirven comprobado.
Que bien que la mencionada Doctora se dió el tiempo de investigar las ventas anuales que genera la terapia con imanes, sería muy interesante que en su estudio también mencione las multimillonarias ventas de las industrias farmacéuticas, quizá se pueda desvelar el verdadero motivo de dicha investigación.
Lo extraño, y este comentario lo hago con todo conocimiento de causa, es que muchos médicos alópatas recurren a los imanes como terapia complementaria en sus tratamientos.
La propia autora admite lo acotado del trabajo que se limita a la aplicación sobre heridas quirúrgicas de imanes, no aclara sino que “siguiendo las recomendaciones del fabricante”, dejando de lado no solo el dolor crónico, sino multitud de manifestaciones de dolor que se benefician de la terapia alternativa con imanes y las técnicas recomendadas por terapeutas reconocidos.
Respecto de la industria Farmacéutica, que puede tener todo menos inocencia, es dable aceptar que nunca admitirá que un tratamiento simple, barato, y prácticamente carente de efectos secundarios pueda ser efectivo, y sobre todo fácil de administrar.
A tal industria le interesa que el “cliente-paciente” tome una pastilla, a eso están dedicados todos los esfuerzos y el marketing de las empresas. No está ni bien ni mal, es simplemente así. Lo que ocurre que como manifestó alguien supra, se obtiene el efecto contrario, las personas ya no confían en los doctores que “demonizan el colesterol”, y hacen un culto de la “pastilla”, intuyen que hay medicamentos necesarios y útiles, pero también se han dado cuenta de que la industria es implacable. En fín hay multitud de artículos que pretenden desacreditar a la terapia magnética, porque aducen que la ciencia médica no le ha dado su aprobación. Pero como en muchos casos, la ciencia médica no está exenta de vicios que le restan credibilidad. Esta no es la medicina romántica de mediados del siglo XX. Por otra parte hay un enorme campo donde la respuesta a los padecimientos por parte de la lex artis, es prácticamente inexistente.
Para concluir, el artículo de marras, habla del supuesto fracaso de la terapia magnética en cuadros post-quirúrgicos, que no son justamente las indicaciones más habituales de la magnetoterapia. Habría que conocer las patologías por las que fueron operados tales pacientes, y la razón de tal dolor post-quirúrgico, y si era factible de aplicación de terapia con imanes. La soberbia del desconocimiento suele conllevar a concluir prematuramente en afirmaciones dogmáticas muy a pesar de los pedestales de quienes las sustentan.
My brother recommended I might like this blog. He was totally right.
This post actually made my day. You can not imagine just how much time
I haad slent for this info! Thanks!
Hay varios elementos del estudio que descalifican sus resultados, uno es aceptado, otro es detectado por contexto. Los enumero.
1: sabemos que la industria farmacéutica se opone a todo lo alternativo pues atenta contra sus intereses económicos multimillonarios. La Dra. Cepeda es una estudiosa ligada a esta industria.
2: Ella reconoce que hacen falta más estudios para validar sus resultados. Yo le pregunto, para validar la certeza de que se hizo, ¿ qué revista científica publica y avala su estudio? ¿O es que es propiedad privada de la empresa para la cual trabaja?
3: Siempre que se leen este tipo de artículos, más confío en lo alternativo. El poder de las farmaceuticas y su búsqueda de ganancia es el primero de sus intereses, no la salud de los pacientes.
4: Yo soy usuario de una nueva terapia con imanes llamada “par biomagnético” y a sido asombrosa en sus resultados.
6. Todos debemos darnos una oportunidad con lo alternativo, es muy económica y casi nunca tiene efectos secundarios.
Mi madre tuvo un procedimiento y le tuvieron que inyectar anestesia y como esta bien delgadita por accidente le tocaron un nervio, en el momento ella no sintió nada x la anestesia ero cuando el efecto de esta se terminó ella daba gritos del dolor , tristemente ella ya estaba en casa y ella sola, ya no maneja y era muy tarde para molestar a los vecinos y tuvo que esperar hasta que amaneció para buscar ayuda. En el hospital no quisieron admitir su error pero le dañaron un nervio en la cadera que la ha dejado con dolores insoportables y los medicamentos que le dan en el hospital son tan fuertes que presenta episodios hasta de demencia. No fue hasta que investigando dimos con esta persona que aún vino a su casa y le aplico los imanes y x primera vez en el mes ella pudo dormir y ahora ella sola se la pone y así, solo con los imanes puede tener alivio. Digan lo que digan, los imanes trabajan!!!!