Un estudio publicado a mediados de 2022 encontró que el 48 % de las poblaciones aviares presenta reducciones en sus tamaños. Esto no significa que todas las especies se estén extinguiendo ahora mismo; significa que sus números están disminuyendo y que, de continuar así, inevitablemente desaparecerán del planeta, como ya lo han hecho un gran número de especies de aves y otras que se encuentran cercanas a desaparecer.
Para entender el estado de las aves en el planeta se requieren esfuerzos importantes en términos investigativos. Por esta razón, expertos de diferentes países se reunieron para entender lo que pasa con ellas en el mundo y para encontrar mejores maneras de cuidarlas. En este equipo, el ornitólogo Luis Miguel Renjifo, profesor titular de la Facultad de Estudios Ambientales y Rurales de la Pontificia Universidad Javeriana, fue el único latinoamericano que hizo parte de la investigación.
Destacado: En febrero de 2023 los amantes de los pájaros se reunirán en el Colombia Birdfair, aprovechando que el país es el primero a nivel mundial en especies de aves.

Las aves, clave para la armonía del mundo
Publicado en Annual Review of Environment and Resources —revista cuyo objetivo es proveer a la comunidad científica síntesis de la investigación en diferentes temas―, el artículo producto de esta experiencia ofrece un completo reporte sobre la distribución de la biodiversidad aviar en el planeta.
Las aves son el grupo biológico más estudiado en la historia del conocimiento científico. Estos animales siempre han sido importantes en nuestras culturas y sociedades; han estado presentes en los desarrollos científicos más relevantes, desde la primera máquina de volar imaginada por Da Vinci tras observar el vuelo de las aves hasta la inspiración que 500 años más tarde permitió a Orville y Wilbur Wright hacer posible el despegue del primer avión. Además, han sido las centinelas de la forma en que está cambiando el planeta, pues su observación y estudio permiten saber el valor de los paisajes para la biodiversidad y así entender el estado de salud de nuestra casa.

Las aves son dispersoras de semillas, consumidoras de insectos e invertebrados, y desempeñan un papel importante en el control poblacional de pequeños roedores. Además, son clave para entender el clima, las estaciones y los momentos de migración.
El trabajo de síntesis y análisis de Renjifo junto a investigadores de Reino Unido, Estados Unidos, Sudáfrica e India destaca la importancia ecológica de las aves, pues son dispersoras de semillas, consumidoras de insectos e invertebrados, y desempeñan un papel importante en el control poblacional de pequeños roedores. Además, son clave en la forma como se comprende el mundo, por ejemplo, para entender el clima, las estaciones y los momentos de migración. Al hablar sobre su importancia, Renjifo explica que, de excluirse las aves de la ecuación ecosistémica, “el crecimiento de los árboles quedaría arrestado”, o sea, que dejarían de crecer, y ese es solo un ejemplo.

¿Por qué se reducen sus poblaciones?
Varias de las amenazas que sufren las aves tienen que ver con la presencia humana en el planeta (véase el recuadro de la p. 10), y entre ellas se encuentra el uso de la tierra para cumplir con necesidades de consumo. Con la fragmentación de sus hábitats ―cuando se deforesta el suelo, ya sea con fines agrícolas o para la creación de vías―, solo entre los siglos XIX y XX se han puesto en peligro 1213 especies. Otra amenaza es el uso de aves para consumo, deporte o tráfico. Los investigadores estiman que entre 11 y 36 millones de animales son cazados o capturados de manera ilegal en la región del Mediterráneo. Además, la caza puede tener efectos subletales, como la perturbación de otras especies y la reducción de la calidad del hábitat, e impactos letales indirectos, por ingestión de plomo en especies que no son objetivo de caza.

Otro factor de disminución de aves son las especies invasoras y el desequilibrio que generan en los ecosistemas a los que llegan. Finalmente, las transformaciones humanas del paisaje, como la iluminación artificial, las telecomunicaciones, el desarrollo farmacéutico y agroquímico y la contaminación causan grandes disturbios en la vida de estas especies. A todo ello se suma el cambio climático, que ya está afectando los diversos ecosistemas del mundo.
Las aves colombianas que vuelan en el texto hacen parte de las 391 especies amenazadas en el mundo. En orden de aparición son: Martín pescador, Rumbito colirrufo, Gallito de roca y Colibrí topacio.
La pérdida de poblaciones de aves en el mundo va en aumento y los índices internacionales de conservación evidencian el deterioro constante de la avifauna en las últimas tres décadas. Dentro de esta tendencia, la mayor cantidad de especies amenazadas se ubica en el trópico, región que alberga más aves.

El caso de Colombia es especial. Al ser el país con mayor riqueza aviar, es uno de los puntos rojos en el mapa de la pérdida de biodiversidad. Por fortuna, la velocidad de deterioro es más lenta aquí que en otras partes del mundo. Por ello, revertir o mitigar dicha pérdida es uno de los grandes retos de la humanidad y de la ciencia detrás de cada esfuerzo para cuidar de las aves.
Del dicho al hecho hay mucho trecho
En el documento, los investigadores hacen énfasis en la conservación y plantean propuestas para mitigar el ritmo en el menoscabo de poblaciones de aves en el mundo. Renjifo subraya que, si no hubieran existido y puesto en práctica medidas de conservación entre los años 1993 y 2000, la extinción de especies de aves y de mamíferos se hubiera triplicado o cuadruplicado.
Y aunque el término conservación se aplica de diferentes formas de acuerdo con la región donde se dictan medidas al respecto, en diálogo con PESQUISA JAVERIANA, Renjifo señaló que la conservación de la biodiversidad debe aplicarse hasta en los jardines de las casas.
Aunque dice que las acciones en este campo son bien conocidas, “del dicho al hecho hay mucho trecho”. Invita, por ejemplo, a revisar los propios hábitos individuales. Ningún ave es necesaria en una jaula. Tampoco necesitamos consumir aves silvestres para sobrevivir, ya que existen alternativas de consumo que aportan más a nuestros requerimientos dietarios y tienen menor impacto en los ecosistemas y en la vida de estos animales.
Desde la ruralidad, se puede aportar a esta transformación sembrando árboles nativos y haciendo uso de cercas vivas para proveer sitios de paso, refugio y alimentación a las especies y ayudar a la dispersión de fauna y flora. “Encontrar la forma de fortalecer los ecosistemas que tenemos cerca es una gran ayuda, y cada acción cuenta”, indica Renjifo.

Ese imperioso interés por las aves
Para este investigador, el interés que despiertan las aves es algo muy humano. Nuestro deseo de conexión y pertenencia al lugar que habitamos hace que las aves sean una fuente de inspiración y expectativa. Además del espacio, compartimos un universo sensorial, “aquello que ven y oyen las aves es lo mismo que nuestros sentidos pueden experimentar”. Estas coincidencias nos permiten hacerlas parte de nuestra identidad y representar con ellas nuestros deseos de conocer y descubrir.
Justamente este interés de las personas por las aves es un tema en el que Renjifo espera indagar próximamente, sobre todo en lo relacionado con el aprecio por la belleza, el papel incluso espiritual que ellas han tenido en las culturas del mundo y la capacidad de compartir una experiencia de admiración y respeto por la naturaleza.
El profesor Renjifo, quien ha dedicado sus esfuerzos a entenderlas en uno de los territorios más biodiversos del planeta, comenta que en su familia cada miembro valoraba la naturaleza de manera especial. Las preguntas sobre los animales le surgieron desde niño, lo que explica la sensibilidad y curiosidad que ha acompañado al investigador que finalmente se convertiría en uno de los nombres sinónimo del conocimiento de las aves en Colombia.
Por eso no dudó en estudiar Biología y, durante su pregrado en la Javeriana, su interés por la investigación se fue consolidando. Su tesis de pregrado fue uno de sus primeros grandes trabajos sobre aves. Allí comparaba la avifauna en dos tipos de bosque ubicados en la región del Quindío. Ya en posgrado, su interés se decantó por temas de cuidado y conservación, enfocando su trayectoria en la conservación de la naturaleza a través de la investigación, la docencia y la gestión institucional.
Gracias a las décadas que ha dedicado a la investigación, Renjifo es referente en la ornitología, y trabaja todos los días para encontrar formas de conservar la permanencia de las aves en el planeta.
Para leer más: § Lees, A. C., Haskell, L., Allinson, T., Bezeng, S. B., Burfield, I. J., Renjifo, L. M., et al. (2022). State of the world’s birds. Annual Review of Environment and Resources, 47(1), 231- 260. https://www.annualreviews.org/doi/pdf/10.1146/ annurev-environ-112420-014642
TÍTULO DE LA INVESTIGACIÓN: State of the world’s birds
INVESTIGADOR PRINCIPAL: Stuart H. M. Butchart y Alexander C. Lees
COINVESTIGADORES: Lucy Haskell, Tris Allinson, Simeon B. Bezeng, Ian J. Burfield, Luis Miguel Renjifo, Kenneth V. Rosenberg, Ashwin Viswanathan.
Departamento de Ecología y Territorio, Facultad de Estudios Ambientales y Rurales
PERIODO DE LA INVESTIGACIÓN: 2021-2022
Este artículo hace parte de la revista Pesquisa Javeriana edición 62 que circula a partir del 11 de diciembre a nivel nacional. Consulte aquí la versión en PDF.