Empezamos este artículo con una invitación: recuerde un profesor o profesora que haya marcado su vida, ojalá para bien. ¿Por qué lo recordó? Es posible que ese profesor haya influido en su futuro profesional o en su vida personal. Lo que es seguro, es que el estilo docente y el clima de aula que propició ese profesor tuvieron algo que ver.
Ser docente representa un gran desafío, una verdad que comparten quienes están al frente de las aulas de nuestro país. Esta realidad no se limita únicamente al conocimiento que el profesor tiene sobre un tema, es algo que podemos reconocer todos los que hemos transitado por experiencias educativas, donde hemos aprendido y conocido a docentes que han dejado una huella en nuestras vidas.
El libro “Clima de aula, estilo docente y educación para la convivencia y la ciudadanía nace de una investigación realizada por Luz Marina Lara Salcedo y Gloria Inés Rodríguez Ávila, ambas docentes de la Facultad de Educación de la Pontificia Universidad Javeriana en la línea de Educación para la ciudadanía, la paz y la convivencia, del grupo de investigación Formación, subjetividades y políticas. En esta investigación participaron como coinvestigadores los estudiantes de Maestría Adriana Parada, Oscar Iván Pinzón y Jhon Jairo Valderrama, quienes hoy en día son magíster en Educación de la misma institución.
Pesquisa Javeriana habló con las docentes Luz Marina y Gloria Inés sobre su línea de investigación y el origen del libro. En primera instancia, explican las investigadoras, se realizó una evaluación de las competencias y capacidades para la vida en los colegios Fe y Alegría.
Se trata de un programa que fue evaluado por primera vez y, como parte de los resultados obtenidos en esta investigación encontraron que había situaciones relacionadas con el clima de aula que abrieron paso a preguntas como ¿Qué tiene que ver el clima de aula con la construcción de relaciones de cuidado, con el manejo de la disciplina y con la participación democrática? Y es allí donde nace la segunda investigación, parte fundamental del libro publicado.
La docente Rodríguez explica que “es muy importante, en términos de educación, ver cómo se están formando los estudiantes para la acción ciudadana, para convivir de forma pacífica, para valorar y vivir en medio de la diversidad, para manejar los conflictos de forma constructiva y para participar democráticamente”.
Adriana Parada, Magíster en Educación egresada de la Universidad Javeriana y docente de la Universidad Abierta y a Distancia (UNAD) y la Corporación Universitaria Minuto de Dios, quién participó como coinvestigadora del estudio, también conversó con Pesquisa y ofreció una visión de qué es el estilo docente, qué es el clima de aula y algunas reflexiones encontradas durante la realización de la investigación.
¿Qué es el estilo docente y qué es el clima de aula?
Adriana explica que para este libro la definición de estilo docente y clima de aula fue construida a partir de varios autores. Enrique Chaux define el clima de aula como la atmósfera de trabajo y la calidad de las relaciones en las que se desarrollan los procesos de enseñanza-aprendizaje. Este clima puede manifestarse tanto entre estudiantes como entre profesores y estudiantes. De la calidad de estas relaciones dependen muchos aspectos del aula, la cual se puede concebir como una “microsociedad” que puede impactar nuestra sociedad de diferentes maneras.
Por otra parte, los estilos docentes, se entienden como la forma en que los profesores manejan sus clases y reaccionan frente a diferentes situaciones que se pueden presentar con sus estudiantes en el aula. Enrique Chaux y Ana María Velásquez, pioneros en describir la relación entre estilo docente y clima de aula en el ámbito educativo, han analizado la tradición que tienen los maestros en Colombia, quienes en su mayoría inician sus procesos de formación a través de un espejo que han tenido de sus profesores, y en Colombia la educación se ha formado de manera autoritaria, lo que permea los estilos docentes en la actualidad.
Profes: a reflexionar sobre su estilo docente
Parada cuenta que “durante el trabajo en campo tuvimos la oportunidad de acompañar a diferentes profesores en varios colegios del país. Después de las observaciones y el trabajo, tenía la oportunidad de reflexionar con los profesores sobre lo observado y conversando con una profesora sobre su trabajo, sobre las normas que debían cumplir los estudiantes y que no se cumplían porque quizás ellos no las tenían claras, entre otros aspectos, la docente me respondió: ‘Me parece muy valioso lo que estás diciendo, pero ¿Qué hago?’”
Y a partir de esta y otras situaciones se transformó la investigación, porque ese “¿Qué hago?” es a lo que quiere responder el libro, para que cada uno pueda cuestionarse, reflexionar, analizar su situación y generar una transformación. Es importante que cada uno pueda analizar el clima de aula y su estilo docente, revisar que puede deconstruir y transformar, siendo guiado a un estilo docente y un clima de aula en que se presenten relaciones de cuidado y relaciones democráticas, que, de la mano con un buen estilo docente, pueda crear una sociedad equitativa, más justa e incluyente.
¿Es el clima de aula relevante en relación con el aprendizaje de los estudiantes?
En el estudio se tuvieron en cuenta tres dimensiones: las relaciones de cuidado, la disciplina y la participación democrática y crítica.
En el cuidado, por ejemplo, las relaciones que tiene el docente con los estudiantes y las relaciones que tienen los estudiantes entre ellos mismos, son parte fundamental para el desarrollo del clima de aula, lo cual se refleja en una formación ciudadana en donde los estudiantes salen del aula y pueden gestar otro tipo de relaciones, que tienen que ver con la cultura de paz.
Por ejemplo, la manera de escuchar al otro, sentir empatía, manejar asertivamente la comunicación, y tener nociones de cuidado, son aspectos importantes para que los estudiantes se relacionen en sociedad.
Justamente estos aspectos generan climas de aula positivos, que impactan a los estudiantes desde lo cognitivo y en su propuesta formativa. Si esto se construye desde el aula tendrá un impacto positivo para todo lo que ocurre en ella, incluyendo el aprendizaje.
¿Cuáles son los estilos docentes?
Hay una relación estrecha entre el estilo docente y el clima de aula. La investigación permitió identificar un estilo de maestro autoritario, que no permite que sus estudiantes opinen ni reflexionen, afectando así el desarrolle el pensamiento crítico, una de las competencias necesaria.
También, pudieron reconocer el otro extremo: docentes con un estilo demasiado permisivo, que no procuran la disciplina ni el seguimiento a las normas, sin direccionamiento hacia los estudiantes, y no se presenta claridad tampoco en el aspecto del aprendizaje.
El punto medio es el estilo docente democrático-asertivo, en el cual los maestros se preocupan por las relaciones de cuidado. Esto se relaciona con la participación democrática y crítica en el aula, entendida, según Parada “no es únicamente responder preguntas de sí o no, sino aquellas en las que el estudiante puede expresar sus opiniones y argumentarlas para generar una ciudadanía que participe en diferentes procesos como las elecciones populares”.
La investigación sugiere que este punto abre el camino a futuras investigaciones, indagando acerca de qué tanta participación se le permite al estudiante o si esta es limitada.
¿El número de estudiantes influye en el clima de aula?
A partir de la investigación no se analizó directamente esta variable. Podría pensarse que en un grupo con pocos estudiantes el clima de aula puede ser favorable, porque permite el desarrollo de un estilo docente democrático-asertivo. Sin embargo, Parada comenta que “tuvimos docentes que tenían más de 40 estudiantes y tenían un estilo docente democrático-asertivo, en el que el clima de aula fue adecuado. Asimismo, en nuestra investigación se escuchó a los estudiantes y no se veía una influencia directa de esta situación sobre el estilo docente y el clima de aula”. Para algunos de estos docentes, los estudiantes tenían una percepción de un docente con un estilo muy respetuoso y asertivo.
¿Tienen planes a futuro con esta investigación?
La docente Luz Marina nos comenta que a partir de reflexiones generadas en diferentes espacios sobre esta temática se han generado ecos, por lo que junto a la docente Gloría Rodríguez consideran importante formular un proyecto de investigación para la Pontificia Universidad Javeriana en la cual se trabajen los estilos docentes de los docentes de esta institución.
De igual forma, también se está generando planeación alrededor de una formación de maestros en temáticas como el clima docente y en diferentes aspectos socioemocionales.
Los estudiantes son clave en el clima de aula
Es importante que cada uno, docentes y estudiantes, pueda analizar el clima de aula y el estilo docente, revisar qué se puede deconstruir y transformar, guiados por relaciones de cuidado y democráticas, que pueda crear una sociedad equitativa, más justa e incluyente.
La investigadora Lara invita a reflexionar, repensar y a tener en cuenta una mirada ontológica del ser docente “nosotros no somos dictadores de clases ni investigaciones, estamos formando y somos persona, establecemos una relación humana y pedagógica con otras personas”.
La investigadora Rodríguez invita a explorar el libro, en él podremos encontrar un capítulo completo de autoevaluación para evaluar nuestro propio estilo docente y en este mismo espacio podremos encontrar cómo interpretar los resultados.
El libro se encuentra disponible en formato digital en el repositorio de la Pontificia Universidad Javeriana haciendo clic aquí y en formato físico en la Tienda Javeriana.