La historia de los adultos mayores en Colombia ha estado marcada por la adversidad. Han sido testigos de profundos cambios en el mundo, quizá más que cualquier otra generación. Así, resulta muy difícil que una persona mayor hable de su vida sin mencionar el conflicto armado, el desplazamiento forzado, la revolución tecnológica y hasta una pandemia.
Estos escenarios que han marcado la vida de muchos de ellos se recogen en un informe publicado por el Instituto de Envejecimiento de la Pontificia Universidad Javeriana, el Hospital Universitario San Ignacio y la organización HelpAge International, con el fin de mostrar cómo viven los adultos mayores en Colombia.
Para contestar esa pregunta y explorar si la situación actual se debía a una de las crisis recientes (alimentaria, de combustible o financiera), los investigadores entrevistaron a 39 personas mayores de diferentes zonas de Bogotá y analizaron las estadísticas publicadas en el país entre 2019 y 2022 sobre esta población.
“La vida de las personas mayores más pobres ha estado marcada desde su infancia por la violencia, el trabajo forzado y la escasez periódica de alimentos” – Informe ‘Colombia: el impacto de la crisis actual en los derechos de las personas adultas mayores ¿crisis o cotidianidad?’
Los datos que arrojó el estudio son preocupantes: para 2021, el 24 % de los adultos mayores de 60 años se encontraba en situación de pobreza monetaria, el 45 % se consideraba pobre y solo el 25 % estaba pensionado.
Una de las personas entrevistadas durante esa investigación comenta sobre las dificultades que experimentan cotidianamente: “Uno sufre mucho por alimentos y para coger transporte. Por muchas cosas la vida es difícil. Gracias a Dios sobrevivimos, pero muy difícilmente”.
En este sentido, José Manuel Santacruz Escudero, psiquiatra de enlace, psicogeriatra y director del Instituto de Envejecimiento de la Pontificia Universidad Javeriana, explica que durante el estudio se dieron cuenta de que la crisis que viven las personas mayores en Colombia no se debe exclusivamente a la pandemia. “La vivencia de crisis es distinta debido a la historia del país, acá la crisis ha sido permanente durante muchísimos años”.
De hecho, algunos de los entrevistados aseguraron que la pandemia por la covid-19 les permitió recibir ayudas con las que normalmente no contaban. “La pandemia no nos trajo crisis. La pandemia nos evidenció las crisis sociales que veníamos trabajando”, dijo en el informe un funcionario que trabaja en la Subdirección para la Vejez de la Secretaría Distrital de Integración Social.
En pocas palabras: la pandemia sirvió para visibilizar las problemáticas de una población que estaba invisibilizada.
Un país que cada vez tiene más adultos mayores
Según el DANE, los adultos mayores constituyen en la actualidad el 14 % de la población total, pero se proyecta que para 2070 será del 32 %.
Santacruz explica que “entre 2039 y 2041 las personas de cero a 14 años serán sobrepasadas por las mayores de 60 años”.
Esto quiere decir que la pirámide poblacional se está invirtiendo rápidamente; mucho más que en otros países del mundo.
La situación implica tomar posiciones acordes a esa velocidad, lo que plantea retos en términos de servicios de salud, seguridad social y adaptación de la sociedad en general.
“Desafortunadamente —afirma Santacruz—, creo que la transición de este envejecimiento que estamos viendo es más rápida que la velocidad que puede tener la respuesta institucional. Por ejemplo, en la gran mayoría de universidades de Colombia, los médicos se están graduando sin haber pasado o haber conocido algo respecto de la geriatría”.
Agrega que hay políticas públicas diseñadas para responder a este cambio en la pirámide poblacional, pero cree que falta llevarlas más a la práctica. “En el papel es una cosa, pero en el día a día el resultado de la implementación de esas políticas no siempre se da con la velocidad que se necesita”, puntualiza.
El investigador Santacruz asegura que, aunque se están tomando medidas, todavía estamos cortos para responder a este cambio. Y para ello, considera necesario pensar cuáles son las verdaderas necesidades que tiene la población mayor en Colombia. “Estas necesidades son tan diversas como las que puede tener cualquier colombiano, pero es fundamental comenzar a intervenir porque es un grupo poblacional creciente, con un estigma muy duro y difícil de romper”.
“La vejez es una etapa de la vida como la niñez, la adolescencia o la adultez, pero estamos inmersos en una cultura que estigmatiza el envejecimiento”. – José Manuel Santacruz Escudero, psiquiatra geriátrico y director del Instituto de Envejecimiento de la Pontificia Universidad Javeriana.
Otro de los retos es que no se puede etiquetar a un adulto mayor por su edad, sino que hablamos de un grupo heterogéneo, con necesidades y potencialidades distintas. “La edad no debería ser la única forma de categorizar a alguien. Es un intento fallido de homogenizar una población que no es posible homogenizar”, añade el experto.
¿Cómo viven los adultos mayores?
“Nosotros rara vez comemos carne… ahorita no se hace desayuno ni medias nueves, nada de eso”, dice una de las personas entrevistadas. Otra agrega que “cada cuatro días se puede comer uno un huevo porque está caro”.
El informe también muestra que en las áreas rurales la incidencia de pobreza extrema pasó de 12,8 % en 2019 a 15,7 % en 2020, más del doble del total nacional y tres veces mayor que en las cabeceras municipales. En esas áreas, el 38,1 % de las personas de 60 años o más se encontraba en situación de pobreza multidimensional.
Otro de los problemas es la pensión. Para empezar, solo el 25 % cuenta con una, pero a eso hay que sumarle que el dinero que reciben es menor que el sueldo que ganaban antes. “Entonces ganas menos y gastas más. Esta es una ecuación que evidentemente lleva a la pobreza”, comenta Santacruz.
La investigación muestra que la pensión que reciben una vez jubilados no es suficiente para mantenerse, lo que obliga a continuar trabajando. Sin embargo, ¿quién se preocupa por aquellos adultos mayores que siguen laborando? La necesidad los obliga a rebuscarse, pero carecen de una protección adecuada, observa el experto.
Y otro punto más, mencionado por Santacruz, es que muchos de ellos son cuidadores. “Son personas mayores requirentes de cuidado, pero en vez de recibir cuidado, están dando cuidado a su pareja o nietos, porque también sabemos que la necesidad económica de hoy en día obliga a que papá y mamá trabajen”.
Sobre esto, uno de los testimonios de la investigación dice que durante la pandemia tenían que compartir la poca comida que les llegara. “Si los hijos no tenían trabajo, los nietos no tenían trabajo, y llegaban a la casa, pues, aunque fuera una aguapanela la compartíamos”.
Enfermos y deprimidos, así envejecen los adultos mayores en Colombia
Ya vimos que una parte de la población adulta mayor en Colombia no vive en las mejores condiciones. La situación no mejora al explorar cómo llegan a la etapa de vejez, pues se hace evidente que el proceso de envejecimiento no está ocurriendo de manera saludable.
De acuerdo con el estudio Sabe Colombia (2015), del Ministerio de Salud, el 84,8% de los adultos mayores padecen dos o más enfermedades.
“Envejecemos desde que nacemos, pero la factura la vemos al final”. – José Manuel Santacruz Escudero, psiquiatra geriátrico y director del Instituto de Envejecimiento de la Pontificia Universidad Javeriana.
Dos condiciones crónicas de salud se destacan en este panorama. La primera es la hipertensión arterial, que afecta a más del 40 % de las personas mayores en Colombia. Esta afección, que involucra una presión arterial elevada, puede tener consecuencias graves para la salud cardiovascular en general.
La segunda es la presencia de síntomas depresivos, que también se manifiesta en más del 40 % de esta población. La salud mental es una preocupación significativa, ya que la depresión puede afectar negativamente la calidad de vida y el bienestar emocional de los adultos mayores.
“La depresión es un tema central ─dice Santacruz─, tanto que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha categorizado la depresión y la demencia en personas mayores como problemas de salud pública. Esto es algo que requiere gran atención porque la salud mental es central en la vejez”.
Agrega que las enfermedades mentales generan un alto grado de discapacidad. En Colombia el suicidio viene en aumento y afecta principalmente a las personas mayores, específicamente a los hombres. “No es un tema menor, sino que son un montón de eslabones que se van uniendo y que llevan a un fenómeno horrible como lo es el suicidio”, afirma el investigador.
Según la OMS y Global Health Observatory, la tasa más alta de suicidio en Colombia para el 2019 se dio en las personas mayores de 85 años, con 11,7; seguido de las personas entre 75 y 84 años, con 8,06. El tercer grupo está entre 15 y 24 años, con una tasa de 5,68.
Además de esto, también se observa un aumento en problemas crónicos relacionados con el envejecimiento. Problemas visuales y auditivos se encuentran entre las condiciones más comunes que afectan a las personas mayores en Colombia. Estas limitaciones sensoriales pueden tener un impacto significativo en la autonomía y la calidad de vida de quienes las padecen.
El camino a seguir
A pesar de los retos que enfrentan los adultos mayores en Colombia, se han logrado algunos avances en términos de legislación y políticas en favor de esta población. La Ley 1850 de 2017, por ejemplo, busca garantizar la atención integral de los adultos mayores y promover su inclusión social. No obstante, es necesario que se implementen de manera efectiva y se asignen los recursos necesarios para su ejecución.
Santacruz plantea que el camino a seguir implica un enfoque integral que abarque áreas como la salud, la vivienda, la inclusión social y la seguridad económica. Dice que es fundamental promover la sensibilización en la sociedad sobre la importancia de respetar y valorar a los adultos mayores, así como crear espacios que les permitan seguir participando activamente en la vida comunitaria.
El Día del Adulto Mayor en Colombia es una oportunidad para reflexionar sobre la situación actual de esta población y comprometernos a trabajar juntos para superar los desafíos que enfrentan. La vejez debe ser una etapa de la vida en la que se puedan disfrutar de los frutos de años de trabajo. Para lograr esto, es necesario un esfuerzo conjunto de gobiernos, instituciones, familias y la sociedad. Solo así podremos garantizar un envejecimiento digno, saludable e inclusivo para todos los adultos mayores en Colombia.