En los años 50 y 60, un grupo de estudiantes costeños llegó a Bogotá para compartir las letras y notas musicales del vallenato. Pioneros de las primeras grabaciones, fueron determinantes para la transición de la primera a la segunda generación de músicos de este género que se anidó en la memoria de los colombianos, y que hoy inaugura una nueva edición de su Festival Vallenato en Valledupar.
Categoría: Música
La formación de nuevo talento, la interacción de instituciones públicas y privadas, y el apoyo de estímulos estatales están siendo decisivos para perfilar el futuro del canto lírico en el país.
Irene Littfack, nuestra columnista musical, visitó Cartagena con ocasión del XIV Hay Festival, que en esta ocasión tuvo invitados del folclor Caribe como Totó la Momposina. Sus versos y la construcción rítmica en torno a ellos resultan en un discurso profundo que apela directamente a la emoción, convirtiéndolo en universal, significativo y memorable.
El sociólogo Nelson Gómez persigue la historia de la salsa. Sus investigaciones dan cuenta de una antología de anécdotas hoy grabadas en un ritmo que ha dejado huella en nuestra cultura.
Durante 2018 contamos las diferentes concepciones artísticas desarrolladas en la Pontificia Universidad Javeriana, y compartimos las mejores historias sobre las obras que nos muestras las diferentes caras de nuestra sociedad.
¿Qué papel ha tenido la salsa en el desarrollo de la cultura popular urbana en Colombia desde los años 60? El investigador Nelson Gómez habló con Pesquisa Javeriana sobre su trabajo, en el que traza un recorrido histórico, sociológico, etnográfico y sentimental por los más de 40 años de este género musical en nuestro país.
El martes 11 de septiembre, en el concierto ‘Compositores Javerianos VII’, diversos profesores presentarán al público su obra. Entre ellos destaca Carolina Noguera, compositora de la distorsión.
La música estimula nuestro cerebro, afecta nuestros sentidos y modifica la percepción de la realidad; puede usarse como vehículo para resignificar situaciones negativas, para superar el dolor, perdonar y reconciliar.
Escuchar música es una actividad que estimula nuestro cerebro y lo afecta positivamente; sin embargo, en Colombia, el apoyo a la formación y el fomento musical está rezagado frente a los esfuerzos latinoamericanos.
Tras dos años de acercamiento a la comuna 15 de Cali, la música fue el gran catalizador para que fluyeran las narraciones, se configurara sentido y se alcanzara el objetivo de investigar la dimensión política en jóvenes de un barrio del distrito de Aguablanca, en el oriente de Cali.